La COP15, conocida como la Cumbre de la Biodiversidad, empieza este 9 de diciembre tras un mes marcado por la COP27, donde se han discutido temas relativos al cambio climático. Se trata de una gran oportunidad para avanzar en compromisos mundiales con la protección de la biodiversidad, la lucha contra la contaminación y el cuidado del medioambiente.
"La biodiversidad decae a un ritmo sin precedentes con un millón de especies animales y vegetales en riesgo de desaparecer", explica Carlos Sordo, experto de medio ambiente de Ayuda en Acción. En efecto, estamos viviendo una extinción masiva de especies similar a la acaecida con la desaparición de los dinosaurios. "Las principales causas son de origen antropológico y por esto debemos trabajar para revertir las causas del colapso", añade.
Si bien la COP15 sobre biodiversidad se celebra cada dos años, la de 2022 es particularmente importante. Se espera que de ella salga un acuerdo “histórico” de cara a 2030 que “guíe las acciones mundiales sobre diversidad”, ha concretado Naciones Unidas sobre la Cumbre. Desde Ayuda en Acción esperamos este plan y esperamos también que sea ambicioso con acciones inmediatas y que sirvan para revertir la degradación de la naturaleza. Nunca había sido tan urgente actuar para hacer frente a la pérdida de biodiversidad.
Las comunidades indígenas, claves para la protección del medio ambiente
Para que el plan que salga de la COP15 sea efectivo se debe reconocer el papel de las comunidades indígenas y locales en la preservación del medio ambiente, y en particular de áreas de alto valor ambiental, tales como bosques, reservar marinas, o selvas. Las comunidades indígenas y locales representan más del 6% de la población mundial, en torno a unos 476 millones de personas, y protegen el 80% de la biodiversidad del mundo. Estas comunidades se encuentran entre las más pobres y vulnerables a efectos del cambio climático. Sin embargo, ellas juegan un papel muy significativo en la lucha contra la destrucción ambiental.
Por ejemplo, las comunidades indígenas de la Selva Maya, en el Petén Guatemalteco, protegen la selva de la deforestación ilegal, de la entrada de ganaderos y otros grupos ilícitos, como narcotraficantes. Adicionalmente, y gracias a aplicaciones móviles, son capaces de monitorear la vida salvaje y denunciar a los departamentos de protección cualquier signo de caza furtiva.
Por esto, además de con financiación y estrategias internacionales para la protección del medio ambiente, se hace patente la necesidad de apoyar a estas comunidades. De hecho, los esfuerzos de protección más eficaces han demostrado la necesidad de integrar a las comunidades en los planes de protección integral, escuchando a los grupos que históricamente han cuidado sus bosques y respetar sus necesidades y tradiciones. El objetivo final es promover la sabiduría y bioculturas locales para convertirlas en prácticas de conservación y restauración de los ecosistemas.
Objetivo final para la COP15: un mundo con más naturaleza para 2030
Organizaciones internacionales proponen proteger al menos el 30% de la superficie terrestre y océanos para 2030. Desde Ayuda en Acción apoyamos este objetivo global y esperamos que el plan de la COP15 tenga medidas suficientes para que este cambio sea real. Además, desde la organización apoyamos activamente a comunidades indígenas y su desarrollo integral, para reducir su situación de pobreza y crear oportunidades económicas que no conlleven prácticas extractivas insostenibles.