Los indicadores de los ODS de la UE indican una tendencia de mejora para conseguir una educación de calidad en España. Sin embargo, alertan de que es necesario realizar mayores esfuerzos para lograr los objetivos para 2030, especialmente en cuanto al abandono escolar y el bajo rendimiento.
Tendencias y desafíos educativos en España: hacia la educación de calidad
En el Día Internacional de la Educación, Ayuda en Acción emite una alerta ante las cifras proyectadas para 2030: solo 1 de cada 6 países cumplirá con el 4 ODS (educación de calidad).
En el caso de España, los indicadores de los ODS de la UE indican una tendencia de mejora de los resultados. Sin embargo, también alertan de que es necesario incidir en mayores esfuerzos para lograr los objetivos para 2030, especialmente en cuanto a la reducción del abandono escolar y el bajo rendimiento. España, lejos de alcanzar la meta de solo un 9% de abandono escolar, se sitúa en el 13,9%. Asimismo, el porcentaje de bajo rendimiento hace saltar las alarmas, ya que nos situamos en un 24,4%, mientras que la meta europea es del 15% para 2030. “ Los últimos datos del informe PISA refuerzan la importancia de abordar las principales preocupaciones en materia de educación identificadas por Ayuda en Acción. Pues evidencian una disminución en el rendimiento académico”, explica Matías Figueroa, director del Programa Europa de Ayuda en Acción.
Además, la organización incide en que la infraestructura escolar básica no es universal ni las oportunidades igualitarias. Esto es fruto de la disminución de gasto general en los últimos 10 años en materia de educación y las disparidades entre comunidades autónomas en políticas sociales. “Aparte de un ‘plan de choque educativo’, debemos reclamar un gasto homogéneo en municipios y comunidades autónomas. Las diferencias territoriales son abrumadoras y hay que garantizar que los centros se financien de manera estable, de acuerdo a las realidades de su alumnado y dotándolos de infraestructuras adecuadas que eliminen las barreras económicas y la discriminación. También deben garantizar la seguridad y la calidad educativa integrando un enfoque en género y colectivos vulnerables y que, en último término, financie la educación como inversión a futuro”, comenta Figueroa.
Recomendaciones para un futuro inclusivo
Los desafíos en el ámbito educativo refuerzan la necesidad de abordar las principales preocupaciones identificadas por Ayuda en Acción en su último estudio sobre jóvenes y trabajo, orientado a prospectivas para 2030. En él, la organización propone una serie de recomendaciones para enfrentar los retos actuales y futuros en la educación:
- Adaptar la oferta educativa a las necesidades del mercado laboral.
- Promover una oferta educativa flexible y continua a lo largo de la vida.
- Formar en competencias digitales y complementarias en un contexto de cambio.
- Considerar la orientación como un pilar fundamental de la educación.
- Equilibrar la digitalización con la presencialidad.
- Fomentar la educación en ciudadanía democrática.
“Estas recomendaciones se presentan como una propuesta prospectiva para 2030. Por ello, instamos a la acción coordinada de gobiernos, autoridades educativas y diversos sectores de la sociedad para garantizar una educación que forme a las futuras generaciones no solo en conocimientos académicos, sino también en habilidades cruciales para enfrentar los desafíos cambiantes del mundo actual”, continúa Figueroa. “La educación es una herramienta clave para el desarrollo personal y social. Requiere un compromiso conjunto para superar las barreras y construir un futuro inclusivo y equitativo para todos”.
La educación de calidad, un pilar fundamental para los ODS a nivel mundial
En línea con la visión de Ayuda en Acción, la educación de calidad se erige como un derecho fundamental y un pilar crucial para la consecución de los ODS. La organización reafirma su compromiso con la construcción de un futuro más equitativo y sostenible, donde la educación sea accesible y de calidad para todos y todas, independientemente de las barreras identificadas en el informe PISA.
Ayuda en Acción insta a gobiernos y autoridades a redoblar esfuerzos, focalizando en revertir las tendencias negativas y garantizando un entorno educativo que promueva la inclusión, equidad y preparación para los desafíos del siglo XXI. La organización recuerda que, a pesar de los avances de los últimos años, se estima que, para 2030, 300 millones de estudiantes carecerán de un nivel básico de alfabetización y aritmética. Además, la tasa de participación en la enseñanza preprimaria sigue estancada en un preocupante 75%, lejos de la meta de acceso universal.
Asimismo, Ayuda en Acción recuerda que la infraestructura escolar básica está lejos de ser universal, ya que una gran parte de centros educativos carecen de servicios básicos como electricidad, agua potable e instalaciones sanitarias básicas (una cuarta parte de las escuelas primarias en el mundo) y en lo que respecta a otros servicios, como equipo informático o infraestructuras
Crear un entorno educativo inclusivo, equitativo y de calidad
El enfoque estratégico de Ayuda en Acción para 2030 se centra en la creación de un entorno educativo inclusivo, equitativo y de calidad. La organización trabaja en colaboración con gestores públicos, equipos directivos de centros, profesorado, familias y alumnado para fortalecer las capacidades de la comunidad educativa. Además, Ayuda en Acción se compromete a reforzar el sistema educativo público, proporcionar oportunidades educativas mediante la incidencia continua en políticas gubernamentales y ofrecer formación en competencias lingüísticas, matemático-lógicas y digitales.
La iniciativa de Ayuda en Acción también destaca la importancia de promover acciones de sensibilización en torno al cambio climático, políticas de género, la lucha contra la xenofobia y el racismo, fomentando la diversidad y asegurando que los menores adquieran los conocimientos necesarios para promover un desarrollo justo, igualitario y sostenible.
Ayuda en Acción, comprometida con la consecución del ODS 4, trabaja incansablemente para fortalecer las capacidades de la comunidad educativa y garantizar el derecho a una educación de calidad. En este contexto, la organización aborda diversos desafíos:
- Reforzamiento del sistema educativo público:
- Dotación de infraestructuras adecuadas en contextos locales.
- Formación y capacitación del personal docente.
- Generación de oportunidades educativas:
- Labor continua de incidencia en gobiernos para lograr el ODS 4.
- Formación en competencias integrales
- Desarrollo de habilidades lingüísticas, matemático-lógicas y digitales.
- Promoción de la diversidad y derechos:
- Acciones de sensibilización sobre cambio climático, igualdad de género, contra la xenofobia y el racismo.
Por ello, en el Día de la Educación y en cada día, Ayuda en Acción aboga por fomentar la educación como pilar para la generación de oportunidades de futuro para la infancia y la juventud y para lograr una sociedad más igualitaria y justa.