La World Compliance Association (WCA), entidad de la que Ayuda en Acción es parte, ha lanzado hoy la Guía de Compliance en el Tercer Sector, un documento que nace con el objetivo de facilitar a las entidades del tercer sector –más de 30.000 en España- una herramienta útil para crear y consolidar un programa de cumplimiento, en un sector que depende de la transparencia y confiabilidad transmitida a sus donantes y personas colaboradoras.
La guía ha sido creada por el Comité de Compliance en el Tercer Sector, en cuya creación y coordinación está implicada Ayuda en Acción con la responsable del área, Laura Gonzalvo. En dicho comité participan compliance officers y representantes de las principales ONG del país, con presencia a nivel nacional e internacional.
Un total de 16 personas expertas han colaborado en esta guía, que recopila varios aspectos del compliance como la responsabilidad penal de la persona jurídica, los mapas de riesgos y la eficiencia de los programas de compliance, siempre tratados desde la naturaleza de las entidades del tercer sector y sus riesgos.
En el prólogo de la guía, escrito por el vicepresidente de la WCA, Iván Martínez, se pone de manifiesto la necesidad de un documento de este tipo, que ayude a los y las profesionales y organizaciones del tercer sector a dar “su primer paso formal en el mundo del cumplimento”.
“Resulta redundante exponer la tremenda labor social que realizan este tipo de entidades en favor de las personas más desfavorecidas”, señala el vicepresidente, y es por este motivo que la WCA entiende “el reto que supone para un sector que implica a más de dos millones de personas, entre personal voluntario y profesionales, gestionar los enormes riesgos que rodean a su actividad, siendo a su vez uno de los grandes pilares de la cohesión social”. “Es un objetivo en el cual todos y todas debemos trabajar”, opina.
Por su parte, la coordinadora de la guía y Chief Ethics & Compliance Officer de Ayuda en Acción, Laura Gonzalvo Diloy, que también ha participado como autora, añade en su prólogo que, siendo el tercer sector un actor clave de cualquier sociedad, garante de la defensa y protección de los derechos humanos, “implantar un programa de compliance ayudará a fomentar la sostenibilidad desde la defensa de los derechos e intereses de todas las partes implicadas”.
Como explica nuestra compañera, hay que destacar “el elevado impacto que tiene sobre la reputación del tercer sector de forma generalizada cualquier escándalo asociado a una organización concreta, debido al efecto dominó que genera. Y es que, la tolerancia de la ciudadanía sobre este tipo de comportamientos es infinitamente menor a la que mostraría ante otros sectores; una cuestión comprensible, si tenemos en cuenta que la razón de ser de nuestras entidades se basa en valores éticos”.
La guía, que cuenta con el patrocinio de Gómez-Acebo & Pombo, Intedya, Bureau Van Dijk y Tirant lo Blanch, ya está disponible para su descarga gratuita en la página de World Compliance Association.