El estancamiento en los avances hacia la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) expone al mundo a no conseguir sus objetivos para 2030. Si no se acelera la implementación, no se conseguirán las metas establecidas. Por esto, Ayuda en Acción hace un llamamiento sobre este punto ante la próxima Cumbre de Naciones Unidas el 18 y el 19 de septiembre, destacando cómo afectará este estancamiento de los ODS a la juventud.
Recientemente, Naciones Unidas publicó el Informe sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2023, donde se muestra que, si no se acelera la implementación de los ODS, no se cumplirá con las metas establecidas. Las deficiencias del actual sistema y la falta de ambición política, agravadas por los efectos de la pandemia de la covid-19, de la crisis climática y de los conflictos como la guerra en Ucrania, han impedido y obstaculizado el progreso.
El informe muestra que la mitad de las 140 metas establecidas para cumplir con los ODS están lejos o muy lejos de seguir la trayectoria deseada. Además, más del 30% de estas metas no han tenido ningún avance, sucediendo que incluso algunas han presentado una involución respecto a 2015. En consecuencia, solo el 12% están encaminadas.
Esto afecta especialmente a las generaciones más jóvenes. Todos los ODS son críticos en el desarrollo de la juventud. Aunque especialmente importantes son las actuaciones en materia de educación y empleo. “Estas son las dos áreas principales de trabajo de Ayuda en Acción, que desde hace 40 años acompaña a miles de personas desde su infancia y juventud. Y el hecho de que ninguna de las metas en ambos ODS esté encaminada afectará especialmente a la juventud y a su futuro”, explica Alberto Casado, director de Incidencia de Ayuda en Acción.
Juventud y ODS 4: Educación de calidad
La educación de calidad es un derecho fundamental para la juventud en todo el mundo. Sin embargo, no podrá lograrse en 2030 si no se aceleran los avances dados en los últimos años. Las metas que tienen que ver con el ODS 4 están lejos de cumplirse. En concreto, en torno al 70% de las metas ha experimentado avances, pero son insuficientes. Del 30% restante no hay datos suficientes.
De hecho, salvo que se adopten nuevas medidas, solo 1 de cada 6 países alcanzará el ODS 4, según los datos del último informe de Naciones Unidas. Además, se calcula que para 2030 84 millones de niñas, niños y jóvenes estarán sin escolarizar y que 300 millones de estudiantes aún no tendrán un nivel de alfabetización y de aritmética básico que les permita abrirse camino en la vida.
Juventud y ODS 8: Trabajo decente
Para la juventud, las cuestiones del desempleo, el subempleo y la mala calidad del empleo han demostrado ser persistentes y desalentadoras en todo el mundo. Además, como Casado añade, “los desafíos de asegurar y conservar un trabajo decente son aún más serios y complejos para los grupos más vulnerables, como mujeres jóvenes, quienes viven en zonas que precisan de asistencia humanitaria, con discapacidades, migrantes y/o personas LGTBI+”.
Y, al igual que pasa con las metas que tienen que ver con la educación de calidad, ninguna de las metas relacionadas con el ODS 8 están encaminadas. Sobre el 65% de las metas ha registrado avances, pero son insuficientes. Sobre el restante hay un estancamiento o involución.
Juventud en el centro
En este contexto, es fundamental impulsar la Agenda 2030. "Es la única agenda global que recoge unos compromisos consensuados y compartidos por toda la comunidad internacional y que recoge cuáles son los retos globales que tenemos como sociedades”, indica el director de Incidencia de Ayuda en Acción. Por esto, ante la Cumbre ODS de Naciones Unidas que se celebra estos 18 y 19 de septiembre, queremos exponer nuestras recomendaciones:
- Pedimos un compromiso político sólido: los y las líderes mundiales deben reafirmar su compromiso con los ODS con políticas concretas y asignar los recursos necesarios para su implementación. Esto incluye la inversión en educación de calidad, programas de empleo juvenil y medidas concretas para abordar el cambio climático y frenar el calentamiento global.
- Participación activa de la juventud: los y las jóvenes deben participar activamente en la toma de decisiones y la implementación de políticas relacionadas con los ODS.
- Alianzas multisectoriales: la implementación de los ODS requiere colaboración entre gobiernos, empresas, organizaciones no gubernamentales y la sociedad civil. Las alianzas multisectoriales pueden acelerar el progreso y maximizar el impacto.
- Enfoque en la educación y la empleabilidad: es esencial priorizar la educación de calidad y la formación técnica y profesional. Esto preparará a la juventud para los empleos del futuro y les brindará las habilidades necesarias para contribuir al desarrollo sostenible.
“La Cumbre debe ser un verdadero punto de inflexión y corregir las injusticias históricas en las que se sustenta el sistema financiero internacional para que los países más vulnerables tengan la oportunidad de conseguir un futuro mejor. No podemos permitirnos el lujo de dejar a nadie atrás”, concluye Casado.