Realizar un trabajo de rebranding puede parecer muy fácil solo si se tiene en cuenta el logo, uno de los elementos con los que la gente suele estar más familiarizada.
Pero es un proyecto complejo en el que intervienen muchas personas tanto por el lado del cliente como por el del equipo de diseño.
El proyecto de rebranding realizado con Ayuda en Acción se basa en un proceso dividido en tres fases:
Diseño estratégico: se desarrollan unos talleres donde se exploran los valores de la organización. Estas sesiones se realizan con stakeholders divididos en grupos para poder definir la personalidad de la marca y así perfilar su esencia con una dinámica colectiva enriquecedora que permite dar forma a lo global desde lo particular.
Propuesta de diseño: el equipo creativo recoge todo lo hablado durante los talleres y traduce los valores claves y la personalidad de la marca a un sistema visual nuevo hecho de formas, colores, tipografías y composiciones. En esta segunda fase, la organización valida la propuesta para asegurarse de que el equipo creativo ha realizado correctamente la traducción de los nuevos valores.
Desarrollo de los assets o elementos de la marca: en esta última fase el equipo de diseño, en conjunto con un equipo interno de Ayuda en Acción, desarrolla todos los aplicativos de la nueva marca. Esta fase se realiza partiendo del manual, que sirve como guía propositiva para el uso y aplicación del logotipo y de los elementos de la nueva identidad. Desde ahí, llegamos a la creación de unas plantillas en distintos formatos para el uso diario de la identidad de Ayuda en Acción.
Un acompañamiento continuo para hacer suyo el rebranding
El proceso es parecido a la manera en la que Ayuda en Acción interactúa en cada comunidad. Relajaelcoco ha acompañado a lo largo del último año a la organización para que sus miembros se familiarizasen con la nueva identidad a partir del rebranding y pudiesen hacer propios los valores esenciales de la marca y utilizarlos en el día a día.
A lo largo de este periodo hemos sido parte integrante del equipo de Ayuda en Acción para poder crear la nueva marca dando continuidad a la anterior y realizando una evolución que resalte su valor fundamental: ser una entidad propulsora con una visión a largo plazo.
De esta manera, haga lo que haga, la esencia de sus objetivos es conseguir tener una esencia transformadora, capaz de estimular el cambio en distintas realidades de Europa, África, Asia y Latinoamérica.
Los principios de Ayuda en Acción en el nuevo rebranding
La marca recoge de forma gráfica un conjunto de principios que tienen la siguiente jerarquía:
Propulsora.
Comprometida.
Empática.
Flexible.
Independiente.
Cercana.
Transparente.
Profesional.
El conjunto de estos valores define la personalidad y la filosofía de Ayuda en Acción y se traduce en una serie de elementos gráficos que forman un sistema visual más completo respecto al anterior. Por ejemplo, el color naranja representa el ser propulsor; la paleta cromática –hecha sobre todo de colores cálidos– es sinónimo de cercanía y de ser empáticos; el tratamiento de las fotos se hace con una luz un poco más cálida para transmitir la sensación de cercanía.
Las composiciones de cada pieza, desde un power point hasta una valla publicitaria, son estructuras racionales que resaltan la profesionalidad de la organización.
Además, la tipografía principal (Bogart) representa cercanía y empatía con sus formas redondeadas y amigables.
Por último, el logotipo está formado por un símbolo que representa una huella y las palabras Ayuda en Acción tratadas con la tipografía principal. Dejar huella es una idea potente que marca una declaración de intenciones en la que tanto Ayuda en Acción como las comunidades donde trabaja cada día, son propulsoras de cambio y dejan una marca indeleble que transforma su entorno cercano.