El voluntariado no es una moda reciente que haya surgido en los últimos años, sino que es una actividad de dilatada tradición, en la que el contexto histórico ha marcado su aparición y evolución. Las primeras actividades de voluntariado surgen vinculadas a las religiones y a su concepto de “amor al prójimo” y posteriormente con los conflictos bélicos que ocurrieron a lo largo de la historia se expandió la labor voluntaria por toda la atención sanitaria que fue necesaria.


¿Pero de dónde nace la idea de ayudar a los demás?


El voluntariado es el conjunto de personas que se unen de forma libre y altruista por un objetivo común para buscar un beneficio social de forma desinteresada. Nace de la idea de ayudar a los que más lo necesitan sin esperar nada a cambio.


En Ayuda en Acción el voluntariado es un gran activo humano con el que contamos en la organización a lo largo de nuestra trayectoria. Ya en 1981, en los orígenes de la organización surgieron una decena de personas que entregaban, además de su cuota de socios, su tiempo y esfuerzo con la idea de apoyar nuestra misión en el cumplimiento de sus fines. Así  fue como se constituyeron los primeros grupos de voluntariado que han apoyado de manera firme el trabajo de Ayuda en Acción con el objetivo común de mejorar la vida de las personas en situación de vulnerabilidad, exclusión y pobreza.


Tras 38 años de andadura, el voluntariado sigue estando presente en la organización. Seguimos impulsando un voluntariado que se cuestione la realidad, que tome conciencia de las causas de la desigualdad e injusticia social, que se comprometa y actúe como motor de cambio para construir un mundo mejor. 


Hablemos de algunas de las competencias y capacidades que reúne nuestro voluntariado en 2019:



  • Escucha activa y capacidad crítica: son sensibles a la realidad, escuchan sin prejuicios, con atención y empatía. Cuestionan también las causas de la desigualdad desde la vulneración de los derechos humanos. 

  • Orientado al bien común: ponen a las personas con las que trabaja en el centro de su labor voluntaria y anteponen el bienestar de la comunidad al bienestar individual, respetando su realidad cultural. 

  • Tienen conciencia solidaria: son corresponsables con las desigualdades e injusticias sociales y retroalimentan la práctica voluntaria con las actitudes y comportamientos ante la vida.

  • Son optimistas y entusiastas: creen en las capacidades humanas, tienen la seguridad de que el cambio es posible. 

  • Tienen un alto grado de compromiso: promueven la participación activa de los destinatarios, desde una dimensión comunitaria. Asumen además cierta responsabilidad como representantes de la sociedad civil al ejercer su función voluntaria.

  • Les encanta trabajar en equipo: desarrollan la acción de forma organizada y coordinada, no individualizada. Hacen una aportación cualificada a la acción social. 

  • Son agentes multiplicadores de la solidaridad: atraen y vinculan a otras personas en la promoción de la equidad, la justicia y la cohesión social. Nos ayudan a mover conciencias, movilizar voluntades y multiplicar impactos. 


En Ayuda en Acción creemos que la ayuda es importante y somos conscientes del valor que tiene el voluntariado en esa tarea, no solo por la ayuda que prestan sino porque, como ellos mismos nos dicen, “el voluntario recibe más de lo que da” y esto supone una importante transformación en el entorno. Contamos con la participación de voluntariado en nuestros programas de intervención, convirtiéndose así en testigos y altavoz de las personas que, aun teniendo voz, no consiguen ser escuchadas.


¿Voluntariado internacional o voluntariado en España?


El voluntariado internacional se acerca a otras realidades diferentes, a otros países, a otras personas. Todo ello lo hace a través de una experiencia vital que les transforma.


Pero no solo se puede ayudar al otro lado del charco, muy cerca de nosotros existen múltiples posibilidades de apoyar a los demás, como nuestros voluntarios y voluntarias del programa Lecxit, un programa de innovación educativa en formato de mentoring. A través de los libros apoyan la animación lectora con el objetivo de promover la igualdad de oportunidades de aprendizaje para la infancia en situación de desigualdad social o educativa.


Y también está el voluntariado local, que a través de las actividades que ellos mismos organizan, son embajadores de la organización dando a conocer situaciones de desigualdad y pobreza. Estos grupos de voluntariado, repartidos por toda la geografía española, nos ayudan a difundir campañas de Ayuda en Acción apoyando la captación de fondos y recursos que nos permiten seguir apoyando a miles de personas a mejorar sus condiciones de vida.


Buscamos voluntarios y voluntarias luchadores, inquietos, idealistas, con ganas de mojarse, de actuar, de implicarse para hacer un mundo más justo, preocupados por los derechos y por el planeta. Con ellos y ellas queremos cumplir los objetivos de acabar con la pobreza, el hambre o la desigualdad.


Así son nuestros voluntarios y voluntarias, súmate a nuestro movimiento #SomosAyuda.