Carta de una directora del CEIP Ramiro Solans
La Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) aprobada por la UNESCO en 1989 aportó una nueva visión de la los niños como sujetos de derechos, que antes no existía. En ella se propone que los derechos de la infancia se basen en cuatro principios fundamentales:
- La no discriminación: toda la infancia tiene los mismos derechos.
- El interés superior del niño: cualquier decisión, ley, o política que pueda afectar a la infancia tiene que tener en cuenta qué es lo mejor para el niño.
- El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo: todos los niños y niñas tienen derecho a vivir y a tener un desarrollo adecuado.
- La participación:la infancia tiene derecho a ser consultados sobre las situaciones que les afecten y a que sus opiniones sean tenidas en cuenta.
La alimentación es un derecho fundamental de todos los seres humanos, ya que el alimento es un elemento esencial sin el que los seres humanos no pueden vivir. Por tanto los gobernantes españoles, tanto en el ámbito nacional como autonómico, deben asumir la responsabilidad y el compromiso de que toda la infancia tenga garantizada esa alimentación, imprescindible para su desarrollo físico y psicológico.
Desde mi experiencia en el colegio Ramiro Soláns de Zaragoza, hace ya más de trece años que atendemos a un alumnado de entornos sociales muy desfavorecidos económica y socialmente, y en riesgo de exclusión. He podido constatar que hay un número cada vez mayor de niños y niñas que en sus hogares carecen de los recursos necesarios para poder proporcionarles una alimentación básica y equilibrada, pero también he visto como hay casos extremos en los que la única comida que ingieren diariamente es la que reciben en el comedor. Cuando ves como a un niño se le iluminan los ojos al ver un plato de comida o te dice “tenemos suerte porque en el comedor comemos tres platos” o está feliz porque hay determinados alimentos a los que sólo tiene acceso en el servicio de comedor, es cuando eres consciente de que las injusticias y la desigualdad existen.
El apoyo a la infancia viene desde el exterior
Hace tres cursos escolares, en mi centro educativo firmamos un convenio de colaboración con Ayuda en Acción, gracias al cual, desde entonces, un número importante de alumnos se han podido beneficiar de ayudas que le han permitido acceder al comedor escolar a lo largo de todo el curso y también cubrir ayudas de comedor para que los alumnos becados por el Gobierno de Aragón, pudieran quedarse a comer durante el mes de junio (las ayudas de comedor ofrecidas por Diputación General de Aragón no cubren este mes).
Hay determinados alimentos a los que sólo tiene acceso en el servicio de comedor
Todos somos conscientes de que la situación de crisis vivida en España ha tenido como consecuencia el crecimiento de las desigualdades, especialmente en la infancia, ya que el aumento del número de familias que no pueden cubrir necesidades básicas de sus hijos, como la alimentación, y la disminución de ayudas por parte de la administración se han visto incrementadas. Pero los niños y niñas necesitan comer todos los días, no es algo de lo que se pueda prescindir en el período vacacional. La infancia debe disponer de una dieta equilibrada para poder desarrollarse física e intelectualmente de manera adecuada. Es por esto por lo que el alimento debe de ser suficiente y nutritivo.
En muchas ocasiones, cuando vives el problema tan de cerca y no dispones en tu escuela de los recursos necesarios para cubrir estas necesidades básicas, la situación de impotencia y de rabia es tremenda. Por tanto, desde mi experiencia personal y profesional, valoro muy positivamente proyectos de acción social como el que promueve Ayuda en Acción con la infancia sin el cual, un número importante de niños y niñas no habrían podido tener acceso a ese derecho a la alimentación reconocido por la Convención de los Derechos del Niño.
Otra iniciativa como las colonias de verano resulta resulta imprescindible en estos tiempos de crisis. Gracias a este servicio niños y niñas pueden tener acceso a una alimentación adecuada y equilibrada durante todo el período vacacional, además de tener la oportunidad de usar adecuadamente su tiempo libre o de cubrir períodos de tiempo en los que los padres no pueden hacerse cargo de sus hijos porque tienen que ir a trabajar o a buscar empleo.
Es importante que la sociedad sea consciente de la realidad tan dura que vive la infancia en España y que conozca iniciativas como la que pone en marcha Ayuda en Acción.
Quiero mostrar mi gratitud porque el centro educativo a quien represento, gracias a esta ONG, dota a todos los alumnos de las mismas oportunidades. Y esto sólo es posible por la colaboración de muchas personas anónimas que contribuyen a hacer viables ideas tan necesarias y valiosas que impulsan la dignidad y la solidaridad para construir un mundo más justo. Este objetivo no está en las manos de uno, sino en las manos de todos.