Coronavirus y violencia de género son dos términos que ya por separado generan sentimientos como el miedo. Si los juntamos, la combinación puede ser peligrosa. Hoy analizamos por qué durante el confinamiento se puso la lupa sobre la violencia machista y sus víctimas.
Violencia machista y coronavirus: el confinamiento
En marzo de 2020 el mundo se confinó. Eso significa que la mayoría de las personas no podíamos salir de nuestras casa si no era para lo estrictamente necesario. Para mucha gente el confinamiento resultaba difícil de cumplir por las implicaciones sociales (o antisociales en este caso) que ello tiene. Sin embargo, para las mujeres que sufrían violencia de género, este encierro obligado fue una condena. Condenadas a vivir con sus maltratadores, las mujeres que sufrían violencia de género fueron las grandes víctimas de esa situación generalizada de confinamiento. Cuando además había menores de por medio, la situación era aún más grave, puesto que de la misma forma sus vidas estaban en peligro constante.
Dubravka Simonovic, relatora especial de Naciones Unidas sobre violencia contra las mujeres, ha señalado que «para demasiadas mujeres y niños, el hogar puede ser un lugar de miedo y abuso«.
En riesgo, pero no olvidadas
El propio Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, se ha referido durante el confinamiento global a la desigualdad de género, incrementada más aún durante la pandemia de la COVID-19. Se necesitará un esfuerzo especial para cumplir el ODS 5, relativo a la igualdad de género. Para proteger a mujeres y niñas/os de la violencia de género, que aumenta siempre en situaciones de conflicto e inseguridad, se ha comprometido a «prevenir y rectificar la violencia doméstica como parte de nuestras respuestas nacionales y globales».
El Ministerio de Igualdad de España lanzó la guía «Estamos contigo. La violencia de género la paramos unidas» con el objetivo de dar a conocer los recursos disponibles a la ciudadanía. Y es que la violencia de género, si bien afecta en primer término a la mujer víctima de ese abuso o maltrato, también repercute en el resto de la sociedad. Hace años que la violencia machista dejó de ser algo exclusivo de la esfera privada para convertirse en una lacra social contra la que todas y todos debemos luchar.
Tras los momentos iniciales de desbordamiento a causa de la COVID-19, es muy importante seguir trabajando contra la violencia de género e intrafamiliar, porque se espera que los recursos sociales para las víctimas no estén a la altura de las necesidades en una época en la que la fragilidad y la vulnerabilidad de los más débiles será aún mayor.
Los datos de la violencia de género en tiempos de coronavirus
Si bien los datos en España confirman un menor número de denuncias en los juzgados especializados en violencia machista desde que comenzó el estado de alarma, sí se produjo un aumento de llamadas al 016. Esto implica que la violencia de género no disminuyó, sino que la libertad de movimientos de las víctimas es mucho menor.
Según las cifras oficiales, dos mujeres fueron asesinadas por sus parejas durante el periodo de confinamiento en España. El portal Feminicidio.net añade además tres feminicidios familiares de hijos que asesinaron a sus madres durante el confinamiento, además de otros dos casos aún por resolver y un feminicidio no íntimo. Ocho mujeres en total fueron asesinadas en España durante la cuarentena.
¿Qué hacer frente a la violencia de género durante la pandemia del COVID-19?
Te vamos a dar una serie de claves para saber cómo actuar si conocemos un caso de violencia machista, o si tú eres la mujer que lo está sufriendo.
Llama y denuncia: en España hace años se cuenta con el teléfono 016 de atención a víctimas de violencia de género. Es totalmente seguro porque no deja rastro en la factura. También estos días se atiende en el 112 para casos de emergencia. Si no eres tú la víctima pero sabes de alguna mujer que lo esté siendo, también es importante que llames y denuncies. Cómo decíamos antes, parar la violencia de género es cosa de todos y todas.
Protégete: busca un sitio seguro en casa donde no pueda agredirte, donde puedas estar a salvo tú y tus hijos e hijas, si es el caso.
Busca ayuda: además de las redes oficiales de apoyo, busca las redes comunitarias. Si puedes, busca algún momento seguro en el que puedas contarle a alguien lo que te está ocurriendo. Los mecanismos de ayuda se activarán para ayudarte.
Salva tu vida: los mecanismos previstos para proteger a quienes sufren violencia de género siguen activos. Si necesitas ser trasladada a una casa de acogida, no tengas miedo. Toma la decisión de salir del círculo de la violencia y salva tu vida y las de quienes más quieres.
Ayuda en Acción: ahora también luchamos contra la violencia de género
Desde Ayuda en Acción hemos puesto en marcha mecanismos para proteger a los grupos de población más vulnerables en todo el mundo durante la crisis provocada por el impacto de la COVID-19. De este modo, en países como El Salvador, donde las cifras de violencia de género son alarmantes, hemos activado redes de apoyo comunitarias a las que mujeres, niñas y niños pueden acudir ante situaciones de violencia intrafamiliar. Además, estamos dando formación a instituciones para dar un mejor respuesta a casos de violencia intrafamiliar y de género durante el tiempo de confinamiento.
¿Sabías que aún hay muchas zonas del mundo donde la gente tiene miedo de dónde pisar? Hoy te hablamos del peligro de las minas antipersonas que, pese a estar prohibidas, siguen siendo una amenaza que afecta sobre todo a la población civil y a la infancia.
¿Qué son las minas antipersonas?
Las minas antipersonas, también llamadas antipersonales, son artefactos explosivos que se entierran en el suelo o se camuflan, y se activan cuando alguien los pisa o golpea. Estas armas afectan sobre todo a la población civil y acarrean graves daños humanos y económicos no solo durante las guerras, sino también cuando estas acaban.
Su uso estuvo muy extendido por todos los ejércitos del mundo hasta los 90. No fue hasta finales de esta década, en 1997, cuando tuvo lugar el esfuerzo más importante dentro de la lucha por su erradicación: la Convención sobre la Prohibición de Minas Antipersonal. Por primera vez en la historia, los países se ponían de acuerdo en prohibir completamente un arma de uso generalizado.
Hasta el momento, 164 países se han sumado a este instrumento del derecho internacional humanitario, también llamado Tratado de Ottawa. Más cifras para la esperanza: 31 países han limpiado sus territorios de minas y 80han destruido más de 59 millones de minas antipersonas almacenadas. Sin embargo, en este post verás que aún queda mucho por hacer…
Tipos de minas antipersonas
Algunos de los principales tipos de minas antipersonas son:
Explosivas o de presión: estallan al ser pisadas u oprimidas.
Minas de rebote: cuando se activan, saltan hasta un metro de su emplazamiento y proyectan fragmentos metálicos en un radio de 100 metros.
De fragmentación: cuando explotan, se dispara una lluvia de fragmentos metálicos con un radio de acción de 200 metros.
Minas antipersonas en el mundo
Pese a los avances, todavía existen muchos lugares del mundo donde las personas pueden morir o sufrir graves heridas con tan solo dar un paso. Según la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas Antipersona (ICBL), más de 6 000 personas fueron víctimas de minas antipersonas o restos de explosivos en 2018. Más de la mitad de ellas murieron.
Estas minas afectan sobre todo a las personas más vulnerables y menos culpables de los conflictos. Así, 7 de cada 10 víctimas son civiles y más de la mitad son menores de edad. Especialmente preocupante es el número de niños y niñas afectados por estas explosiones que, según los expertos, ha crecido un 12% en los últimos dos años.
Los restos de explosivos de la guerra siguen afectando a millones de personas en unos 50 países. Según el ICBL, Afganistán, Malí, Birmania, Nigeria, Siria y Ucrania encabezan la “lista negra” de países con más minas antipersonal. También hay cifras preocupantes en Angola, Bosnia, Camboya, Chad, Croacia, Irak, Colombia, Tailandia, Turquía, Yemen, Azerbaiyán y Sáhara Occidental.
Explosivos en los armarios y minas que entorpecen la paz
El desminado y retiro de otros artefactos explosivos es una tarea titánica. En Irak, por ejemplo, el trabajo en las zonas que estuvieron en manos del ISIS es extremadamente peligroso. Si nos centramos en Mosul, los explosivos están por todas partes. No solo bajo tierra, sino en edificios, entre los escombros, en los armarios, en las casas… Los expertos hablan de “contaminación en tres dimensiones”. Solo en 2018 se eliminaron en esta ciudad unos 17 000 explosivos activos y se desactivaron más de 700 cinturones suicidas.
En Colombia, el desminado es un obstáculo para reconstruir la paz. En 2019, se calcula que hubo al menos una víctima al día de minas antipersonas y artefactos explosivos. El mayor número de afectados se da en las zonas rurales.
Desde Ayuda en Acción defendemos el derecho a vivir sin miedo a pisar una mina. Creemos que el horizonte 2030 debe estar libre por completo de esta amenaza y acompañamos a las comunidades en su derecho a una vida segura, digna y pacífica.
“Me opongo a la violencia porque, aun cuando parece hacer el bien, el bien es solo temporal; y el mal que hace es permanente”. Este contundente argumento en contra de la violencia nació de la mente de Mahatma Gandhi, un activista político indio que terminó convirtiéndose en un icono mundial del pacifismo. Defender esta causa le costó la vida: Ghandi fue asesinado en Nueva Delhi tal día como hoy y para reivindicar su legado, cada 30 de enero se celebra en todo el mundo el Día Escolar de la No Violencia y la Paz.
Por desgracia, más de medio siglo después de su muerte, los mensajes de Ghandi siguen siendo tan necesarios como entonces. Los broncos debates que se desarrollaron cada día en la política son tan solo una muestra de la agresividad que predomina en el ámbito político no solo en nuestro país, sino en todo el planeta. También otros ámbitos (la economía, los medios de comunicación o las relaciones sociales) parecen regirse por la ley del más fuerte. De hecho, aunque no siempre seamos conscientes, estamos constantemente sometidos a múltiples violencias: pequeñas y grandes, manifiestas y latentes, visibles e invisibles. El peligro de acostumbrarse a convivir con ellas es que terminamos por naturalizarlas como parte de la vida, lo cual no es cierto: los conflictos sí son inherentes al ser humano, y por ello inevitables; la violencia como mecanismo para resolverlos no lo es. Y cuanto antes seamos conscientes de ello, mejor.
Educar para la paz
En su momento, uno de los aspectos más novedosos de la filosofía de Ghandi fue concebir la paz no solo como un fin, sino como un medio para acabar con la injusticia y la pobreza. Esta idea se resume en la que quizá sea su frase más repetida: “no hay camino hacia la paz, la paz es el camino”. En este punto, y sin ánimo de enmendarle la plana al mismísimo Mahatma, me atrevería a añadir que ese camino de la paz pasa inevitablemente por la educación. Es el único mecanismo con el que podemos conseguir que las próximas generaciones crezcan sabiendo que la violencia no es un recurso válido para la resolución de conflictos y que, como seres humanos, contamos con otras alternativas enormemente poderosas: el diálogo, la empatía y la escucha.
Así pues, una educación equitativa, inclusiva y de calidad es una herramienta imprescindible para la construcción de paz. En el caso de las sociedades afectadas por situaciones de conflicto y post-conflicto, la educación se convierte directamente en un salvavidas para los niños y niñas, que suelen ser especialmente vulnerables en este tipo de contextos, ya que permite:
Proteger a los menores frente a los distintos tipos de violencia a los que se pueden ver sometidos. Entre ellos destacan el tráfico de menores, el reclutamiento como niños y niñas soldado, la prostitución, la trata o el matrimonio infantil.
Normalizar la vida de los menores afectados por los conflictos, ayudándoles a superar la situación de estrés que atraviesan y a recomponer sus vidas. Se les dota de un espacio no solo de aprendizaje, sino también de juego y ocio en el que desarrollar una vida social adecuada con otros niños y niñas de su edad.
Sin llegar a ese extremo, en países como el nuestro tampoco nos libramos de nuestra dosis diaria de violencia, que ha llegado incluso a los centros educativos, donde miles de niños y niñas se enfrentan cada día al acoso escolar en las aulas. La educación nos ofrece la oportunidad detransformar la violencia en paz, transmitiendo una serie de valores que promueven la resolución no violenta de los conflictos: respeto, tolerancia, solidaridad, actitud crítica, compromiso, autonomía, diálogo, participación. La responsabilidad de desarrollar estas capacidades, de las que dependen que podamos convivir en sociedad de manera pacífica, debe empezar tanto en las familias y como en los centros educativos.
¿Qué podemos hacer?
Las organizaciones sociales llevamos tiempo trabajando en esta línea a través de la llamada Educación para la Ciudadanía Global (ECG). Se trata de un proceso educativo que, entre otras cosas, promueve la transformación social y la construcción de paz a través del diálogo y la participación. La ECG es una herramienta imprescindible en la educación para la paz, ya que contribuye a que los niños, niñas y jóvenes:
Reconozcan y eviten actitudes como el racismo y la xenofobia, que son fruto del miedo a lo diferente. De esta manera, es posible generar climas de convivencia positiva, tolerancia y respeto a la diversidad en nuestras comunidades educativas de acogida.
Reconozcan el valor de la diversidad, mediante la comprensión y el conocimiento: convivir solo es posible si sabemos que el otro existe, si descubrimos lo que nos une y tenemos en común, y aceptamos nuestras diferencias como una riqueza.
Sean conscientes de la necesidad de acabar con las situaciones de violencia y discriminación en las aulas, como el acoso escolar, a través de la transmisión de valores como el rechazo a la violencia, la empatía y el respeto.
Desde la Campaña Mundial por la Educación (CME), una iniciativa que en España lidera Ayuda en Acción, llevamos más de veinte años defendiendo el derecho de todas las personas a acceder a una educación equitativa, inclusiva y de calidad, una educación que promueva la paz y que, como decía el propio Ghandi, saque a la luz lo mejor de cada persona. Por eso, un año más queremos celebrar el Día Escolar de la No Violencia y la Paz reivindicando la educación como derecho, pero también como palanca de cambio imprescindible para construir sociedades pacíficas. Os invitamos a transitar con nosotros ese camino de la paz y la educación para, juntos y juntas, “ser el cambio que querríamos ver en el mundo”.
El 30 de enero se celebra el Día de la paz, conmemorando el aniversario del nacimiento de Gandhi. Es un día especialmente relevante en el calendario escolar, porque se dedica esta fecha a tener espacios de reflexión para generar conciencia sobre su importancia.
Vivimos en un mundo donde a menudo la confrontación se ha normalizado como una actitud cotidiana entre las personas, haciendo que no nos fijemos en aquellos ejemplos de resolución pacífica de los conflictos a través de la escucha activa y la empatía.
Por ello, en Ayuda en Acción promovemos la convivencia positiva en las comunidades educativas y en las familias fomentando la convivencia intercultural. Lo hacemos porque creemos en ella como forma de respeto y de puesta en valor de la diversidad, por la riqueza que supone para infancia y juventud. La globalización ha hecho que las personas estemos cada vez más conectadas, y por eso es necesario poner en valor la pluralidad como riqueza para el aprendizaje educativo.
Actividades para fomentar la paz
Desde hace tiempo, muchas de nuestras comunidades educativas han dado ya pasos para poner en práctica la mejora de su convivencia y su clima escolar generando numerosas iniciativas. Hoy traemos algunos ejemplos que pueden servir a centros y docentes como ejemplo e inspiración:
Planes de convivencia para el desarrollo de competencias ciudadanas en la infancia, en los que se incluye por ejemplo iniciativas como los Observatorios de la Convivencia e Igualdad.
Programas como el de Alumno Ayudante Mediador, que pone en práctica la mediación escolar como instrumento que promueve la cultura de la paz y de la no violencia dentro de los centros escolares.
Acciones deportivas o lúdicas para formentar la convivencia y el desarrollo de sociedades en paz: dentro de esta opción encontramos los patios cooperativoso la realización de carreras con fines solidarios.
Para crear sociedades en paz es importante también promover la educación emocional, sobre todo en edades críticas para el desarrollo emocional, como son la infancia y la adolescencia. Una de las metodologías más difundidas para poner en práctica este tipo de educación es el mindfulness, que pusimos en práctica en el CEIP Ramiro Solans de Zaragoza a través de la experiencia Pausa Activa. Dentro de esta metodología, os proponemos también lecturas como “Tranquilos y atentos como una rana”, que ofrece historias y ejercicios simples y breves para niños y niñas de 5 a 12 años y sus familias, o “Respirad”, que propone mindfulness para padres/madres con hijos adolescentes.
Las enseñanzas en aspectos socioemocionales permiten potenciar habilidades personales, así como la relación con iguales, con el objetivo de promover una buena convivencia y trabajar en equipo, o bien enfrentarse a conflictos para los cuales sea necesario buscar soluciones, teniendo presente la importancia de gestionar con responsabilidad las acciones que realizamos.
Fomentar una cultura de paz en el mundo
Desde nuestro programa educativo, EducAcción, trabajamos para promover la puesta en práctica de materiales didácticos con propuesta de acciones para las escuelas y familias centradas en el Día de la paz:
“Círculos de diálogo para la paz”: que contiene actividades como retratos para la paz, regalando abrazos, música para las emociones… Espacios como estos ayudan a generar diálogos sobre diversidad y tolerancia con los más pequeños.
“Música de colores” que se puso en práctica por los CEIP La Florida y CEIP La Almadraba de Alicante, trabajando el cuento “Una grieta en el muro”.
Todas estas iniciativas nos enseñan que, si somos capaces de promover el diálogo como una forma de construir el mundo que queremos (y no como una forma de imponer nuestras ideas a otras personas), nos acercaremos a una cultura de paz y convivencia entendiendo los conflictos como una oportunidad para construir algo mejor.
En contextos de violencia, generar más violencia solo nos lleva a un círculo negativo en las relaciones. Por eso, es fundamental transmitir la importancia del diálogo, del respeto a la diversidad y a la discrepancia, y formentar una gestión positiva de las emociones que haga comprender la singularidad de cada persona.
Porque como ya escribió Gloria Fuertes en uno de sus poemas dedicados a la paz, es fácil llevarla a la práctica si ponemos voluntad para ello.
1 de cada 3 niños en el mundo sufre maltrato psicológico infantil, una forma de violencia a la que tendemos a restar importancia, pero con consecuencias tan destructivas como las derivadas de la violencia física o el abandono. Así lo afirma un estudio de la Universidad McGill, en Canadá, que demostró mediante escáneres cerebrales que el rechazo, la humillación, la intimidación y otras formas de maltrato psicológico infantil tienen las mismas consecuencias para el cerebro del niño que la violencia física y el abandono. Desde ansiedad a depresión, agresividad…
El profesor David Bueno, experto en la relación de neurociencia y comportamiento humano, confirma esta idea. Un niño no recordará lo que ha vivido antes de los 3 años, pero eso no significa que no deje huella en su cerebro. Y si ha sufrido algún tipo de violencia estructural, establecerá un patrón que difícilmente podrá cambiar: miedo o más violencia.
Maltrato psicológico infantil en España
Desde 2012 España cuenta con un Registro Unificado de casos de sospecha de Maltrato Infantil (RUMI), dependiente del Ministerio de Sanidad. Dicho registro recoge de manera conjunta las denuncias del personal sanitario, los centros educativos, los servicios sociales o los cuerpos de seguridad de cada comunidad. ¿Los resultados? Los registros de maltrato psicológico infantil superan año tras año a la violencia física y el abuso sexual.
Otro de los referentes en este tema es la Fundación ANAR, responsable del Teléfono de Ayuda a Niños y Adolescentes en riesgo: 900 20 20 10. Se trata de una línea confidencial, gratuita y atendida las 24 horas del día por psicólogos, para cualquier situación en la que un menor requiera su ayuda. Su último informe sobre la evolución de la violencia contra la infancia constata un incremento del maltrato psicológico infantil de un 600% desde 2009. Además, aunque en su caso la mayor parte de llamadas atendidas corresponden a violencia física, esta a menudo se combina también con insultos verbales y otras formas de abuso emocional prolongadas en el tiempo.
Las familias también son responsables del maltrato psicológico infantil
El acoso escolar es una forma de maltrato psicológico infantil, y debemos aprender a prevenirlo y detectarlo a tiempo. Pero es solo la punta del iceberg. Los datos parecen indicar que buena parte de la violencia contra los menores no se genera en las aulas. La ejercen aquellos que deberían estar cuidando y protegiendo a los niños: sus familias. También el abuso emocional. Y se convierte así en un mal invisible, enormemente difícil de detectar y especialmente dañino.
Pero, ¿en qué consiste el maltrato psicológico infantil de padres o cuidadores? Agresiones verbales continuadas, rechazo a cualquier forma de contacto, ausencia de respuesta a las expresiones o necesidades emocionales del niño. Y todos aquellos comportamientos que suponen desvalorizarle de forma constante, humillarle y fomentar el miedo.
Es decir, cuando hablamos de maltrato psicológico infantil no hablamos de acciones puntuales sino de una pauta frecuente o prolongada en el tiempo. Pero el principal problema a la hora de detectarlo no es solo que se produzca en espacios normalmente privados. Los expertos coinciden en señalar algo más enraizado en nuestra sociedad. El cómo la disciplina del miedo o las críticas constantes al niño/a, e incluso un cierto nivel de insultos se han normalizado. Y la agresión al menor se asume como una forma de imponer disciplina, un comportamiento que no permitimos como sociedad en ninguna otra etapa de la vida. De ahí que diversas instituciones propongan la necesidad de una mayor formación, de más Escuelas de Padres/Madres que faciliten a los progenitores herramientas para educar en positivo, evitando así las consecuencias destructivas que puede tener el maltrato psicológico infantil.
Cómo detectar el maltrato psicológico infantil
Por sí solo no deja huellas visibles, heridas o moratones. Pero sí hay señales que pueden darnos algunas pistas. De ahí que, a la necesidad de formar a padres y madres, se sume la de dar mayor información a la sociedad en su conjunto, muy especialmente a profesionales que por su labor pueden entrar en contacto con menores.
Las consecuencias del maltrato psicológico infantil dependen de la duración, la edad, quienes hayan sido los maltratadores… Y pueden manifestarse de muchas formas distintas. En algunos casos, los niños muestran apatía, falta de concentración o dificultades para dormir. También cambios bruscos de peso, falta de higiene personal o agresividad. Según la procedencia del maltrato, las víctimas pueden evitar a los compañeros, o alargar el tiempo en el patio o deambulando por el barrio para evitar ir a casa. Y mostrar ansiedad, depresión, y en los casos más graves, incluso comportamientos de ANS (Autolesión No Suicida) o ideas de suicidio.
La buena noticia es que tú también puedes ayudar. Estate atento a las señales y muéstrate cercano y abierto a escuchar a cualquier menor de tu círculo que necesite hablar: un amigo de tus hijos, un vecino, una alumna… pueden ser víctimas de maltrato psicológico infantil o violencia física. En España más de 30 menores al día lo son.
Quizás el término te suene. Es posible que lo hayas escuchado en las noticias, pero ¿sabes realmente qué son los crímenes de lesa humanidad? La Real Academia Española (RAE) define leso/a como “que ha recibido un daño o una ofensa”. Por tanto, podríamos decir que se trata de aquellos crímenes que dañan a la humanidad.
Hablamos de delitos especialmente graves, que suponen un ataque contra derechos humanos fundamentales. Y que son, además, un agravio no solo contra sus víctimas concretas, sino contra la Humanidad en su conjunto. Pero esa es, sin duda, una definición muy amplia.
Crímenes de lesa humanidad: significado
El Diccionario del Español Jurídico es más concreto, y ofrece algunos ejemplos que pueden ayudarte a entenderlo mejor. Define el crimen de lesa humanidad como aquel “de especial gravedad, como el asesinato, el exterminio, la esclavitud, la deportación o el traslado forzoso de población, la privación grave de libertad o la tortura, que se comete como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque”.
Así pues, de acuerdo con esta definición, para poder calificar los hechos de crímenes de lesa humanidad no solo debe haber una acción violenta grave, también otras circunstancias. Por ejemplo, no se considera crimen de lesa humanidad una acción aislada. Esta debe formar parte de un objetivo mayor contra un sector de la población. Además, debe haber intención por parte de quién la comete. O lo que jurídicamente llamamos ‘dolo’. Y solo se consideran crímenes de lesa humanidad si han sido cometidos contra población civil. Quedan excluidos, según esta definición, los ataques contra soldados en combate.
Crímenes de lesa humanidad en el Estatuto de Roma
La definición del Diccionario del Español Jurídico es, en todo caso, un resumen o interpretación del concepto original. Desde finales del siglo XIX, y especialmente tras las guerras mundiales, el Derecho Internacional fue tipificando las conductas criminales que consideraba más graves, aquellas que atacaban derechos fundamentales. Y recogió algunas de estas en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, del 17 de julio de 1998. Es ahí donde se sientan las bases del concepto crímenes de lesa humanidad.
Se definen, en concreto, en el artículo 7. En él se citan, como en la definición anterior, el asesinato, el exterminio, la esclavitud, la deportación, la tortura o la privación de libertad física violando las normas del Derecho Internacional. Pero, además, se añaden otros delitos. Entre ellos, la “persecución de un grupo o colectividad con identidad propia fundada en motivos políticos, raciales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos, de género…”. Y se señala al apartheid o la desaparición forzada de personas, entre ellos.
Además, se añaden delitos sexuales. “Violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización forzada u otros abusos sexuales de gravedad comparable”. Al igual que el resto, todos ellos serán considerados crímenes de lesa humanidad siempre que se cometan también “como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque”.
Ejemplos de crímenes de lesa humanidad
El apartheidsufrido por la población en Sudáfrica o el genocidio de Ruandaen 1994 son algunos ejemplos de esa variedad de formas que pueden adoptar los crímenes de lesa humanidad. Durante el intento de los hutus de exterminar a la población tutsi, asesinaron a un millón de personas, aproximadamente. Pero las violaciones sistemáticas fueron también parte del horror. Y se calcula que más de 200 000 mujeres padecieron entonces ese tipo de crímenes de lesa humanidad.
Por desgracia, tampoco podemos decir que estas acciones sean cosa del pasado. Este mismo año expertos de las Naciones Unidas denunciaban posibles crímenes de lesa humanidad en el conflicto de Sudán del Sur. Entre ellos, también torturas y violaciones. Y todavía hay mucho por hacer en lo que respecta a los derechos humanos en África.
En cualquier caso, hay otras cosas que podemos hacer para frenar las injusticias. Por ejemplo, ayudar a los países más desfavorecidos a salir de la pobreza y la desigualdad. Y en eso tú también puedes colaborar.
El 2 de octubre es el Día Internacional de la No Violencia. Pero ¿te has preguntado alguna vez por qué ese día y no otro? La razón es muy fácil: la fecha conmemora el nacimiento de Gandhi y recuerda así el mensaje de paz del activista indio.
Mahatma Gandhi lideró el movimiento independentista indio frente al poder de los británicos. Pero su oposición no era violenta ni su mensaje animaba a los enfrentamientos armados. El discurso de la no violencia de Gandhi animaba a una resistencia pacífica. “La no violencia es la mayor fuerza a disposición de la humanidad. Es más poderosa que el arma de destrucción más poderosa concebida por el ingenio del hombre”, afirmaba. Así, las huelgas de hambre, las movilizaciones pacíficas, las marchas y discursos se convirtieron en sus armas para el cambio social.
Quizás estés pensando que los días internacionales no sirven para nada. Pero el Día Internacional de la No Violencia es una oportunidad para poner sobre la mesa un problema que no desparece. Sirve para recordar que existe una vía pacífica para la resolución de conflictos, esa de la que Gandhi se convirtió en pionero, y de la que es actualmente un icono.
¿Desde cuándo se celebra el Día Internacional de la No Violencia?
Es una efeméride relativamente reciente: la Organización de las Naciones Unidas (ONU) instauró el Día Internacional de la No Violencia en una resolución aprobada por la Asamblea General el 15 de junio de 2007. En ella expresaba su deseo de asegurar una cultura de paz, tolerancia, entendimiento y no violencia. Y animaba a celebrar anualmente esa fecha a todos los Estados Miembros y particulares.
¿Qué entendemos por no violencia?
Entre los sucesores de la no violencia de Gandhi en el plano teórico está el profesor Gene Sharp. Él ha sido uno de los principales defensores de la no violencia como lucha contra el poder de los últimos años. El Día Internacional de la No Violencia es también un buen día para recordarlo. La ONU lo cita como uno de los referentes en la materia.
En ‘Las Políticas de la Acción No Violenta’ definía la no violencia como la técnica por medio de la que las personas que rechazan la pasividad y la sumisión pueden llevar adelante su lucha sin violencia. Aseguraba que “la acción no violenta no es un intento por prevenir o ignorar el conflicto. Es una respuesta al problema de cómo actuar efectivamente en política, especialmente cómo ejercer el poder de manera efectiva.”
De hecho, tal y como señala la ONU, una de las bases de la no violencia es la idea de que el poder de los gobernantes depende del consentimiento de la población. Y si la población no consiente ni coopera puede enfrentarse a él. ¿Cómo? Marchas de protesta, discursos, ocupaciones, bloqueos y otras acciones pacíficas de no-cooperación.
Ideas para celebrar el Día de la No Violencia
• Realizar actividades educativas y de sensibilización: si tienes un blog o eres activo en redes sociales, aprovecha para contar en qué se basa la filosofía de la no violencia. También puedes compartir algunas de estas frases sobre la paz de grandes pensadores de la historia.
• Celébralo en el cole: el Día Escolar de la No Violencia y la Paz (30 de enero) también conmemora una fecha clave en la vida de Gandhi: el aniversario de su asesinato. O sea, en una fecha distinta al Día Internacional de la No Violencia. Si trabajas como docente, puedes aprovechar ambas fechas para sensibilizar al alumnado. Hemos preparado una serie de actividades que te serán muy útiles.
• Charla con tus hijos e hijas: el Día de la No Violencia también puede celebrarse en casa. Podéis intercambiar puntos de vista sobre cómo gestionar conflictos en el parque o en el recreo. O, por ejemplo, leer con ellos historias o cuentos que hablen de la paz.
Lo importante es no olvidar que en realidad el Día Internacional de la No Violencia es todos los días del año. Y que, como afirmaba Gandhi, cambiar el mundo empieza por nosotros mismos.
Mohandas Karamchand Gandhi. Ese era su verdadero nombre. Pero la historia le conoce como Mahatma Ghandi, como lo rebautizó el poeta Rabindranath Tagore. En sánscrito, Mahatma significa algo así como ‘alma grande’. Y la no violencia de Gandhi tuvo mucho que ver en ese apodo.
“Existen muchas causas por las cuales estoy dispuesto a morir, pero ninguna por la cual esté dispuesto a matar”, escribió en 1927. Una afirmación que recoge la esencia de su filosofía, la no violencia de Gandhi. Pero ¿cómo llegó un joven abogado a una afirmación como esa?
Tras estudiar Derecho en Inglaterra, Gandhi vivió un tiempo en Sudáfrica. Y fue allí donde sufrió prejuicios y discriminación debido a su raza. Así comenzó su labor en la política y el activismo pacífico por los derechos civiles.
Más tarde, en su regreso a la India, viajó por todo el país. Allí sus discursos combinaban política y pasajes de los libros sagrados de distintas religiones. Y con el tiempo se convirtió en el líder del movimiento independentista de la India frente al poder británico. Pero lejos de animar a las masas a la lucha armada, la no violencia de Gandhi promovía la resistencia pacífica y nuevos modos de oposición.
Características de la no violencia de Gandhi
Las huelgas de hambre fueron una de las principales armas de la no violencia de Gandhi. “La fuerza no proviene de la capacidad física sino de la voluntad indomable”, afirmaba. Y era esa férrea voluntad la que parecía guiar sus ayunos. Pero la desobediencia civil no violenta implicaba también otros métodos. Por ejemplo, la conocida como ‘Marcha de la sal’.
Entre marzo y abril de 1930, decenas de discípulos, periodistas y el propio Gandhi recorrieron más de 300 kilómetros hasta el océano Índico reclamando su derecho a producir sal. Entonces era un producto de vital importancia en la India para la conservación de los alimentos. Y hasta ese momento cualquier indio podía obtenerla recogiendo agua del mar y dejándola evaporar. Sin embargo, los británicos se habían adueñado de la producción y habían establecido un impuesto sobre su consumo. Pero tras la famosa marcha, miles de personas por todo el país los desafiaron. Se acercaron al mar a recoger sal, y muchas fueron encarceladas. También el propio Gandhi. No obstante, el virrey acabó finalmente cediendo y reconociendo el derecho de los indios a producirla.
Así, la marcha se convirtió en una inspiración para los movimientos de no violencia de Martin Luther King. Y en 1930 la revista Time llegó a compararla con el episodio del motín del té en Boston, que desembocó en la independencia de Estados Unidos. La marcha de la sal no tuvo el mismo resultado, pero dejó claro a los británicos el poder de la no violencia de Gandhi para unir al pueblo en su contra.
Frases de la no violencia de Gandhi
«Me opongo a la violencia porque cuando parece causar el bien este solo es temporal. El mal que causa es permanente”, señalaba.
Gandhi era un ferviente partidario de la resistencia pacífica, y estaba convencido de que “la no violencia es la mayor fuerza a disposición de la humanidad. Es más poderosa que el arma de destrucción más poderosa concebida por el ingenio del hombre”.
Y llegó incluso a decir:
“Quisiera sufrir todas las humillaciones, todas las torturas, el ostracismo absoluto y hasta la muerte, para impedir la violencia.”
Gandhi y la independencia de la India
A pesar de sus esfuerzos, la proclamación de la independencia no tuvo lugar hasta 1947. Pero la no violencia de Gandhi seguía persiguiendo un cambio social. Entre otras cosas, trató de promover el desarrollo del ámbito rural y siguió luchando por dignificar a los ‘intocables’, la casta más baja. Gandhi llevaba tiempo conviviendo con ellos y retaba a las castas superiores a mostrar qué parte de los textos sagrados predicaba la humillación a las castas inferiores.
“He pensado durante años que algo debe andar mal en una sociedad que ha convertido el recoger los desperdicios en la ocupación exclusiva de una clase marginada”, afirmaba. Los ‘dalits’ o intocables eran entonces los encargados de limpiar las letrinas. Y ya en 1910 Gandhi había obligado a personas de las castas más altas a hacer algo así. Pero aún hoy este oficio sigue existiendo y usándose como una forma de discriminación de las mujeres. Está prohibido por el Gobierno, y el Tribunal Supremo reconoció en 2014 que suponía una vulneración de los derechos humanos.
El legado de la no violencia de Gandhi
La suya es una lucha inacabada. Pero, además de sus esfuerzos por cambiar las cosas, conservamos de él otro legado, el discurso de la no violencia de Gandhi. Decenas de mensajes en defensa del amor, la honestidad y el cambio social que trascienden el tiempo y el espacio. De hecho, muchos campan a sus anchas en la red. Mensajes virales de motivación que a veces circulan sin señalar su origen, como el famoso “si quieres cambiar el mundo, cámbiate a ti mismo” o “la paz es el camino”.
El 2 de octubre puede ser un buen día para empezar. El día que nació Gandhi, y la fecha en que se celebra el Día Internacional de la No Violencia.
Autor :
Nora Benito: Equipo de comunicación y contenidos de Ayuda en Acción
“No hay camino para la paz, la paz es el camino”, decía Mahatma Gandhi, una de las muchas frases de paz que se han guardado en nuestra memoria con el paso de los años. Y es que la falta de paz tiene muchos nombres: la pobreza como violencia, la precariedad como menoscabo de igualdad, la intolerancia como traba para la convivencia.
El Día Escolar de la No Violencia y la Paz se celebra todos los años el 30 de enero, con motivo del aniversario del asesinato de Mahatma Gandhi, icono pacifista que practicó la desobediencia civil no violenta. Esta conmemoración es solo una semilla en el cultivo de la cultura de paz que se trabaja en los colegios todos los días del año.
Hoy queremos recuperar algunas frases de paz que nos legan grandes personalidades de distintos ámbitos. La no discriminación, el respeto, la tolerancia, el diálogo y la convivencia son instrumentos para construir la paz y así nos los recuerdan.
Frases sobre la paz de personajes históricos
Son muchas las personalidades que a lo largo de la historia han luchado por conseguir la paz. Aunque no sea solo con palabras -sino también con hechos-, nos han legado grandes frases de paz que nos enseñan cuáles son sus pareceres.
En Ayuda en Acción celebramos este día recordando algunas de estas frases de paz:
“Si queremos un mundo de paz y de justicia hay que poner decididamente la inteligencia al servicio del amor.” / Antoine de Saint-Exupéry
“Los hombres construimos demasiados muros y no suficientes puentes.”/ Isaac Newton
“La paz no es solamente nuestro objetivo final, sino también la única manera en que lograremos nuestro objetivo.» / Martin Luther King
“Sal y obtén paz, vive paz y respira paz y la tendrás tan pronto como desees.” / John Lennon
“Derribar y destruir es muy fácil. Los héroes son aquellos que construyen y trabajan por la paz.” / Nelson Mandela
“Un país no es más fuerte por el número de soldados que tiene, sino por su índice de alfabetización.”/ Malala Yousafzai
“La paz es hija de la convivencia, de la educación, del diálogo. El respeto a las culturas milenarias hace nacer la paz en el presente.” / Rigoberta Menchú
“La paz no es la ausencia de guerra, es una virtud, un estado de la mente, una disposición a la benevolencia, la confianza y la justicia.” / Baruch Spinoza
Algunas cifras sobre la falta de paz en el mundo
La violencia de género, el acoso escolar, el maltrato, la pobreza… A continuación recordamos algunas cifras sobre la falta de paz en el mundo:
• La violencia de género es la principal causa de muerte o discapacidad de las mujeres de entre 16 y 44 años.
• Cada 15 segundos, una mujer es maltratada en alguna parte del mundo.
• 1,4 millones de personas pierden la vida cada año debido a la violencia, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
• Alrededor de 246 millones de jóvenes padecen acoso escolar en el mundo, según datos de la Unesco.
• El 90% de las muertes causadas por la violencia se producen en países de ingresos bajos y medios, según la OMS.
Este Aviso Legal regula la utilización por parte de los usuarios de las páginas web contenidas en el sitio en Internet
www.ayudaenaccion.org (en adelante “website”), propiedad de la Fundación AYUDA EN ACCIÓN (en adelante "Ayuda
en Acción"), con domicilio social en la calle Serrano Anguita 13. Impact Hub Barceló. 28004 Madrid y con C.I.F.
G82257064, según consta en escritura pública otorgada ante el notario del Ilustre Colegio de Notarios de Madrid D.
José María Peña y Bernaldo de Quiros, el 11 de febrero de 1999 con el número 227 de su protocolo de la que queda
informado en cumplimiento con lo dispuesto en la Ley 34/2002, de 11 de Julio, de Servicios de la Sociedad de la
Información.
La navegación por el website, atribuye la condición de usuario y conlleva la aceptación plena y sin reservas del presente
Aviso Legal. Ayuda en Acción, a través de su website, facilita a los usuarios el acceso a determinados contenidos
puestos a disposición bien por Ayuda en Acción o por terceros proveedores de servicios y contenidos. El usuario acepta
voluntariamente que el uso de éstos tiene lugar, en todo caso, bajo su única y exclusiva responsabilidad.
II-OBLIGACIONES DEL USUARIO
El usuario se obliga a usar los contenidos de forma diligente, correcta, lícita y de conformidad a la Ley y al presente
Aviso Legal. En particular, se compromete a no utilizar los contenidos con una finalidad contraria a la Ley, moral u orden
público; a no reproducir o copiar, no distribuir, no permitir el acceso público, no transformar y no modificar ningún tipo
de contenido del website, a excepción de que cuente con autorización expresa y en cualquier tipo de soporte, ya sea
físico o lógico, de Ayuda en Acción o con autorización expresa, en su caso, del legítimo titular de los derechos sobre los
contenidos antes mencionados.
Asimismo el usuario se obliga a no utilizar el diseño y el código fuente de las páginas web del website con una finalidad
contraria a la Ley, moral u orden público.
Según la Ley 15/1999 de protección de datos de carácter personal, Ayuda en Acción le informa que los datos que nos facilita serán incorporados a un fichero de nuestra responsabilidad con la finalidad de gestionar su solicitud, mantenerle informado de la organización y enviarle información de las campañas que realizamos a través de correo electrónico. Puede ejercer sus derechos de acceso, rectificación, oposición y cancelación en cualquier momento contactando con la Fundación Ayuda en Acción.
Tenemos mucho que contarte. Suscríbete a nuestra newsletter
1542
Política de Privacidad
La presente política de privacidad (en adelante, la "Política de Privacidad") aplica a todos los datos de
carácter personal que aporte a la Fundación AYUDA EN ACCIÓN, con domicilio en calle Serrano Anguita 13, Impact Hub Barceló
28004, Madrid (en adelante "Ayuda en Acción"). Se entienden por datos personales aquella información
sobre una persona física que permite su identificación, de forma directa o indirecta.
Tratamos sus datos personales, en base a la relación actual que mantienes con nosotros, y que podrán
haber sido aportados a través de diferentes medios, tales como, entre otros, un formulario en la Web, la
participación en alguna de nuestras campañas y la solicitud a recibir información electrónica sobre
nuestra actividad.
En esta política te explicamos cómo Ayuda en Acción protege y garantiza la seguridad de sus datos
personales, haciendo uso para ello de medidas de seguridad técnicas y organizativas apropiadas y
adecuadas:
I- RESPONSABLE DEL TRATAMIENTO
Ayuda en Acción, como responsable del tratamiento, se preocupa por el cumplimiento de las obligaciones
legales en materia de protección de datos de carácter personal, en especial, cumpliendo con nuestras
obligaciones de información. Además, estamos a su disposición para cualquier consulta o inquietud que le
pueda surgir al respecto.
En todo momento, podrá ponerse en contacto con nosotros o bien a través del correo electrónico
lopd@ayudaenaccion.org o por correo postal enviando una comunicación dirigida al Responsable de Datos
Personales de Ayuda en Acción a la Calle Serrano Anguita 13, Impact Hub Barceló 28004 Madrid, ante cualquier duda
o necesidad que tenga en materia de protección de datos personales.
II- FINALIDADES DEL TRATAMIENTO Y LEGITIMACIÓN
A los efectos de lo previsto en el Reglamento 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de
abril de 2016 relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de
datos personales y a la libre circulación de estos datos y por el que se deroga la Directiva 95/46/CE
('RGPD'), le informamos que Ayuda en Acción tratará los datos de carácter personal que nos haya
facilitado para las siguientes finalidades y bajo la base legal que le detallamos a continuación:
Si usted es...
Finalidad para la cual tratamos sus datos personales
Base legal para tratar sus datos personales
Candidato (demandante de empleo)
Gestionar el proceso de selección al que ha optado y así poder evaluar su candidatura, así como para otras que pudieran abrirse en el futuro.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, a excepción de Perú en cuyo caso se requiere su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Contraparte
Asegurar el conocimiento de la contraparte con la que Ayuda en Acción colabora, puesto que será la que nos ayudará a implementar nuestra intervención en el territorio.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Destinatario de nuestra intervención (beneficiario/a mayor de edad)
Identificar a los destinatarios de nuestra intervención para adecuarla a las necesidades y contexto en el que operamos, así como llevar a cabo acciones de sensibilización y rendir cuentas a nuestros grupos de interés con fines formativos y/o de promoción de nuestra actividad.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente. Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales, en los siguientes casos excepcionales: i) cuando se levanten testimonios que incluyan datos sensibles, y/o ii) cuando se transmitan los datos personales de beneficiarios/as de nuestro programa de Acción Social en España a colaboradores, financieras y/o agencias de medios basados fuera de España y/o la Unión Europea y que no ofrezcan un nivel adecuado de protección en materia de privacidad y protección de datos personales.
Destinatario de nuestra intervención (beneficiario/a menor de edad)
Ídem al caso anterior. En el caso de niños/as apadrinados/as también sería gestionar y administrar su vinculación al programa de Vínculo Solidario de Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente. Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales, otorgado por su padre/madre/tutor legal, en el caso de niños/as apadrinados/as.
Embajadores (prescriptores)
Gestionar y administrar los embajadores de Ayuda en Acción, esto es, gestión de viajes y colaboración de los mismos.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Empleado/a
Gestionar y administrar los recursos humanos de Ayuda en Acción, esto es, pago de salarios y beneficios sociales, cobertura del seguro médico y/o de accidentes, gestión de vacaciones y ausencias, vinculación y promoción interna, entre otros.
Acreditar tu condición como empleado/a en términos de idoneidad y honorabilidad.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como aquellas vinculadas al ámbito de la seguridad y protección social, al ámbito laboral y legal, y disponer de medidas necesarias con fines de medicina preventiva o laboral y evaluación de la capacidad laboral de nuestros empleados/as.
Empresa colaboradora
Rendir cuentas sobre su colaboración.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Interesado/a
Compartirle información institucional, incluso a través de correo electrónico, para mantenerte actualizado sobre nuestras actividades.
Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Informante y/o afectado (denuncia)
Gestionar las denuncias interpuestas a través del canal de denuncias.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Informante (consulta, sugerencia y queja)
Gestionar las consultas, sugerencias y quejas recibidas a través de los canales de comunicación habilitados.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Miembro del Patronato o Consejo Asesor
Gestionar su nombramiento como miembro del órgano al que pertenece, así como facilitar el buen funcionamiento del mismo.
Acreditar su condición como miembro del Patronato o Consejo Asesor en términos de idoneidad y honorabilidad.
Publicar su trayectoria profesional en la Web.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como cumplir nuestras obligaciones legales.
Proveedor
Gestionar y administrar la gestión de proveedores de Ayuda en Acción, esto es, pago de facturas.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Socio/a
Gestionar su vinculación como socio/a, esto es, tramitar sus donativos, enviar las certificaciones tributarias, conocer su grado de satisfacción, fidelizar su compromiso mediante incrementos de donativos o participación en acciones concretas, entre otros.
Compartirle información institucional, incluso a través de correo electrónico, para mantenerle informado sobre nuestras actividades.
Dar a conocer la labor de nuestros socios/as, así como sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Tercero que da de alta a un(a) socio/a
Gestionar incidencias que pudieran surgir con la vinculación del/de la socio/a.
Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Voluntario/a
Gestionar y administrar el voluntariado de Ayuda en Acción.
Acreditar su condición como voluntario/a en términos de idoneidad y honorabilidad.
Dar a conocer la labor de voluntariado, así como sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como cumplir las obligaciones vinculadas al ámbito de la seguridad y protección social.
En algunos casos, trataremos datos personales en relación con su imagen, para lo que se recabará su
consentimiento cuando así se considere necesario y el tratamiento no se encuentre amparado en ninguna de
las anteriores finalidades y bases legales.
Ayuda en Acción pone en su conocimiento que en caso de ser usuario de nuestro website podremos crear un
archivo automatizado con los datos personales que a través del mismo nos proporcione, los cuales podrían
ser utilizados con la finalidad de efectuar estadísticas, la gestión de incidencias o la realización de
estudios de mercado, entre otras actividades. Dicho tratamiento se basará en los intereses legítimos de
Ayuda en Acción.
La no cumplimentación de ciertos datos de carácter personal nos impedirá prestar todos aquellos
servicios para los que dichos datos sean necesarios.
III- PLAZO DE CONSERVACIÓN DE LOS DATOS
Conservaremos sus datos personales durante el tiempo necesario para el cumplimiento de las finalidades
descritas anteriormente en función de las bases jurídicas que habilitan el tratamiento. Sin perjuicio de
lo anterior, la conservación también se efectuará por el periodo que resultase necesario para la
formulación, el ejercicio o la defensa de potenciales reclamaciones y/o siempre que lo permitiese la
legislación aplicable. En este último supuesto, sus datos personales sólo serán tratados a efectos de
acreditar el cumplimiento de obligaciones legales o contractuales a las que estamos sujetos.
IV.- DESTINATARIOS DE LOS DATOS
En ningún caso comunicaremos, explotaremos tus datos personales o los destinaremos a un fin distinto del
detallado anteriormente. Cabe mencionar que los datos podrán ser comunicados a los empleados y
colaboradores de la Fundación AYUDA EN ACCIÓN que necesiten conocer información sobre usted para llevar
a cabo labores relacionadas con las finalidades indicadas anteriormente.
Con este fin, le informamos que sus datos personales podrán ser transferidos a otras oficinas de la
Fundación AYUDA EN ACCIÓN, las cuales aplicarán las mismas medidas de seguridad técnicas y organizativa
para garantizar el tratamiento adecuado de sus datos personales. En el supuesto de que desee apadrinar a
niños/as residentes en México, le informamos que sus datos serán comunicados para gestionar su
apadrinamiento a la entidad Ayuda en Acción de México Asociación Civil, la cual dispone de garantías
suficientes.
Algunas organizaciones que colaboran con Ayuda en Acción, tales como agencias de medios de comunicación,
agencias de viajes, o financieras, entre otras, pueden tener acceso a los mismos como encargados de su
tratamiento, para que así podamos llevar a cabo nuestra labor. En ocasiones este tercero puede
encontrarse en países situados fuera del Espacio Económico Europeo que no ofrecen un nivel de seguridad
adecuado de acuerdo al RGPD. En estos casos, firmamos un contrato por escrito entre ambas partes en el
que se incluyen las cláusulas contractuales tipo según estándares aprobados por la Comisión Europea para
la transferencia de información personal fuera del Espacio Económico Europeo. En todo caso, la
transferencia, la conservación y la gestión que realicemos de su información personal seguirán
rigiéndose por la presente Política de Privacidad.
Igualmente le informamos que los datos relativos a su aportación serán comunicados a la Agencia
Tributaria con la finalidad de tramitar sus beneficios fiscales, así como a aquellas otras autoridades
de control que nos soliciten sus datos siempre que se respeten todos los preceptos previstos legalmente.
V.- TUS DERECHOS
Ayuda en Acción le informa sobre la posibilidad que te asiste de ejercitar los derechos de acceso,
rectificación, supresión, portabilidad y limitación del tratamiento de los datos personales que tenemos
recogidos.
De manera adicional, tendrá el derecho a oponerse al tratamiento de sus datos personales en los
supuestos recogidos en la normativa de protección de datos aplicable.
Dichos derechos podrás ejercitarlos, por ti mismos o por quien te represente, mediante solicitud escrita
y firmada dirigida al Responsable de Datos Personales de Ayuda en Acción, a través de:
Dicha solicitud debe contener los siguientes datos: su nombre y apellidos, domicilio a efectos de
notificaciones, fotocopia de tu Documento Nacional de Identidad o Pasaporte, y petición en que se
concreta la solicitud. En el caso de representación, deberá probar la misma mediante documento
fehaciente. Para enviar esta solicitud puede hacer uso de los modelos puestos a disposición por parte de
la Agencia Española de Protección de Datos, los cuales pueden ser firmados electrónicamente.
Además de los anteriores derechos, en caso de que sea la base jurídica del tratamiento de sus datos
personales, también tiene derecho a retirar el consentimiento otorgado en cualquier momento mediante el
procedimiento más arriba descrito, sin que dicha retirada de consentimiento afecte a la licitud del
tratamiento anterior a la retirada del mismo, y sin que en ningún caso condicione el tratamiento de
datos personales efectuado en virtud de otra base legal. Ayuda en Acción podrá continuar tratando sus
datos personales en la medida en que la ley aplicable lo permita.
En general, respondemos las solicitudes en el plazo de un mes, aunque según la complejidad y el número,
se podría prorrogar el plazo otros dos meses más, en cuyo caso se lo notificaremos.
Finalmente, te recordamos que tienes derecho a presentar una reclamación ante la autoridad de control
pertinente.
VI. MODIFICACIONES A LA POLÍTICA DE PRIVACIDAD
Ayuda en Acción se reserva el derecho de modificar su Política de Privacidad de acuerdo con la
legislación aplicable en cada momento. En todo caso, podrá consultar cualquier modificación de la
Política de Privacidad en nuestra página Web.
Política de Privacidad
La presente política de privacidad (en adelante, la "Política de Privacidad") aplica a todos los datos de
carácter personal que aporte a la Fundación AYUDA EN ACCIÓN, con domicilio en Calle Serrano Anguita 13, Impact Hub Barceló
28004, Madrid (en adelante "Ayuda en Acción"). Se entienden por datos personales aquella información
sobre una persona física que permite su identificación, de forma directa o indirecta.
Tratamos sus datos personales, en base a la relación actual que mantienes con nosotros, y que podrán
haber sido aportados a través de diferentes medios, tales como, entre otros, un formulario en la Web, la
participación en alguna de nuestras campañas y la solicitud a recibir información electrónica sobre
nuestra actividad.
En esta política te explicamos cómo Ayuda en Acción protege y garantiza la seguridad de sus datos
personales, haciendo uso para ello de medidas de seguridad técnicas y organizativas apropiadas y
adecuadas:
I- RESPONSABLE DEL TRATAMIENTO
Ayuda en Acción, como responsable del tratamiento, se preocupa por el cumplimiento de las obligaciones
legales en materia de protección de datos de carácter personal, en especial, cumpliendo con nuestras
obligaciones de información. Además, estamos a su disposición para cualquier consulta o inquietud que le
pueda surgir al respecto.
En todo momento, podrá ponerse en contacto con nosotros o bien a través del correo electrónico
lopd@ayudaenaccion.org o por correo postal enviando una comunicación dirigida al Responsable de Datos
Personales de Ayuda en Acción a la Calle Serrano Anguita 13, Impact Hub Barceló 28004 Madrid, ante cualquier duda
o necesidad que tenga en materia de protección de datos personales.
II- FINALIDADES DEL TRATAMIENTO Y LEGITIMACIÓN
A los efectos de lo previsto en el Reglamento 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de
abril de 2016 relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de
datos personales y a la libre circulación de estos datos y por el que se deroga la Directiva 95/46/CE
('RGPD'), le informamos que Ayuda en Acción tratará los datos de carácter personal que nos haya
facilitado para las siguientes finalidades y bajo la base legal que le detallamos a continuación:
Si usted es...
Finalidad para la cual tratamos sus datos personales
Base legal para tratar sus datos personales
Candidato (demandante de empleo)
Gestionar el proceso de selección al que ha optado y así poder evaluar su candidatura, así como para otras que pudieran abrirse en el futuro.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, a excepción de Perú en cuyo caso se requiere su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Contraparte
Asegurar el conocimiento de la contraparte con la que Ayuda en Acción colabora, puesto que será la que nos ayudará a implementar nuestra intervención en el territorio.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Destinatario de nuestra intervención (beneficiario/a mayor de edad)
Identificar a los destinatarios de nuestra intervención para adecuarla a las necesidades y contexto en el que operamos, así como llevar a cabo acciones de sensibilización y rendir cuentas a nuestros grupos de interés con fines formativos y/o de promoción de nuestra actividad.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente. Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales, en los siguientes casos excepcionales: i) cuando se levanten testimonios que incluyan datos sensibles, y/o ii) cuando se transmitan los datos personales de beneficiarios/as de nuestro programa de Acción Social en España a colaboradores, financieras y/o agencias de medios basados fuera de España y/o la Unión Europea y que no ofrezcan un nivel adecuado de protección en materia de privacidad y protección de datos personales.
Destinatario de nuestra intervención (beneficiario/a menor de edad)
Ídem al caso anterior. En el caso de niños/as apadrinados/as también sería gestionar y administrar su vinculación al programa de Vínculo Solidario de Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente. Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales, otorgado por su padre/madre/tutor legal, en el caso de niños/as apadrinados/as.
Embajadores (prescriptores)
Gestionar y administrar los embajadores de Ayuda en Acción, esto es, gestión de viajes y colaboración de los mismos.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Empleado/a
Gestionar y administrar los recursos humanos de Ayuda en Acción, esto es, pago de salarios y beneficios sociales, cobertura del seguro médico y/o de accidentes, gestión de vacaciones y ausencias, vinculación y promoción interna, entre otros.
Acreditar tu condición como empleado/a en términos de idoneidad y honorabilidad.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como aquellas vinculadas al ámbito de la seguridad y protección social, al ámbito laboral y legal, y disponer de medidas necesarias con fines de medicina preventiva o laboral y evaluación de la capacidad laboral de nuestros empleados/as.
Empresa colaboradora
Rendir cuentas sobre su colaboración.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Interesado/a
Compartirle información institucional, incluso a través de correo electrónico, para mantenerte actualizado sobre nuestras actividades.
Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Informante y/o afectado (denuncia)
Gestionar las denuncias interpuestas a través del canal de denuncias.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Informante (consulta, sugerencia y queja)
Gestionar las consultas, sugerencias y quejas recibidas a través de los canales de comunicación habilitados.
Cumplir nuestras obligaciones legales.
Miembro del Patronato o Consejo Asesor
Gestionar su nombramiento como miembro del órgano al que pertenece, así como facilitar el buen funcionamiento del mismo.
Acreditar su condición como miembro del Patronato o Consejo Asesor en términos de idoneidad y honorabilidad.
Publicar su trayectoria profesional en la Web.
Sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como cumplir nuestras obligaciones legales.
Proveedor
Gestionar y administrar la gestión de proveedores de Ayuda en Acción, esto es, pago de facturas.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Socio/a
Gestionar su vinculación como socio/a, esto es, tramitar sus donativos, enviar las certificaciones tributarias, conocer su grado de satisfacción, fidelizar su compromiso mediante incrementos de donativos o participación en acciones concretas, entre otros.
Compartirle información institucional, incluso a través de correo electrónico, para mantenerle informado sobre nuestras actividades.
Dar a conocer la labor de nuestros socios/as, así como sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente.
Tercero que da de alta a un(a) socio/a
Gestionar incidencias que pudieran surgir con la vinculación del/de la socio/a.
Su consentimiento para el tratamiento de sus datos personales.
Voluntario/a
Gestionar y administrar el voluntariado de Ayuda en Acción.
Acreditar su condición como voluntario/a en términos de idoneidad y honorabilidad.
Dar a conocer la labor de voluntariado, así como sensibilizar y rendir cuentas sobre las actividades desarrolladas por Ayuda en Acción.
Cumplir las obligaciones contractuales derivadas de la relación existente, así como cumplir las obligaciones vinculadas al ámbito de la seguridad y protección social.
En algunos casos, trataremos datos personales en relación con su imagen, para lo que se recabará su
consentimiento cuando así se considere necesario y el tratamiento no se encuentre amparado en ninguna de
las anteriores finalidades y bases legales.
Ayuda en Acción pone en su conocimiento que en caso de ser usuario de nuestro website podremos crear un
archivo automatizado con los datos personales que a través del mismo nos proporcione, los cuales podrían
ser utilizados con la finalidad de efectuar estadísticas, la gestión de incidencias o la realización de
estudios de mercado, entre otras actividades. Dicho tratamiento se basará en los intereses legítimos de
Ayuda en Acción.
La no cumplimentación de ciertos datos de carácter personal nos impedirá prestar todos aquellos
servicios para los que dichos datos sean necesarios.
III- PLAZO DE CONSERVACIÓN DE LOS DATOS
Conservaremos sus datos personales durante el tiempo necesario para el cumplimiento de las finalidades
descritas anteriormente en función de las bases jurídicas que habilitan el tratamiento. Sin perjuicio de
lo anterior, la conservación también se efectuará por el periodo que resultase necesario para la
formulación, el ejercicio o la defensa de potenciales reclamaciones y/o siempre que lo permitiese la
legislación aplicable. En este último supuesto, sus datos personales sólo serán tratados a efectos de
acreditar el cumplimiento de obligaciones legales o contractuales a las que estamos sujetos.
IV.- DESTINATARIOS DE LOS DATOS
En ningún caso comunicaremos, explotaremos tus datos personales o los destinaremos a un fin distinto del
detallado anteriormente. Cabe mencionar que los datos podrán ser comunicados a los empleados y
colaboradores de la Fundación AYUDA EN ACCIÓN que necesiten conocer información sobre usted para llevar
a cabo labores relacionadas con las finalidades indicadas anteriormente.
Con este fin, le informamos que sus datos personales podrán ser transferidos a otras oficinas de la
Fundación AYUDA EN ACCIÓN, las cuales aplicarán las mismas medidas de seguridad técnicas y organizativa
para garantizar el tratamiento adecuado de sus datos personales. En el supuesto de que desee apadrinar a
niños/as residentes en México, le informamos que sus datos serán comunicados para gestionar su
apadrinamiento a la entidad Ayuda en Acción de México Asociación Civil, la cual dispone de garantías
suficientes.
Algunas organizaciones que colaboran con Ayuda en Acción, tales como agencias de medios de comunicación,
agencias de viajes, o financieras, entre otras, pueden tener acceso a los mismos como encargados de su
tratamiento, para que así podamos llevar a cabo nuestra labor. En ocasiones este tercero puede
encontrarse en países situados fuera del Espacio Económico Europeo que no ofrecen un nivel de seguridad
adecuado de acuerdo al RGPD. En estos casos, firmamos un contrato por escrito entre ambas partes en el
que se incluyen las cláusulas contractuales tipo según estándares aprobados por la Comisión Europea para
la transferencia de información personal fuera del Espacio Económico Europeo. En todo caso, la
transferencia, la conservación y la gestión que realicemos de su información personal seguirán
rigiéndose por la presente Política de Privacidad.
Igualmente le informamos que los datos relativos a su aportación serán comunicados a la Agencia
Tributaria con la finalidad de tramitar sus beneficios fiscales, así como a aquellas otras autoridades
de control que nos soliciten sus datos siempre que se respeten todos los preceptos previstos legalmente.
V.- TUS DERECHOS
Ayuda en Acción le informa sobre la posibilidad que te asiste de ejercitar los derechos de acceso,
rectificación, supresión, portabilidad y limitación del tratamiento de los datos personales que tenemos
recogidos.
De manera adicional, tendrá el derecho a oponerse al tratamiento de sus datos personales en los
supuestos recogidos en la normativa de protección de datos aplicable.
Dichos derechos podrás ejercitarlos, por ti mismos o por quien te represente, mediante solicitud escrita
y firmada dirigida al Responsable de Datos Personales de Ayuda en Acción, a través de:
Dicha solicitud debe contener los siguientes datos: su nombre y apellidos, domicilio a efectos de
notificaciones, fotocopia de tu Documento Nacional de Identidad o Pasaporte, y petición en que se
concreta la solicitud. En el caso de representación, deberá probar la misma mediante documento
fehaciente. Para enviar esta solicitud puede hacer uso de los modelos puestos a disposición por parte de
la Agencia Española de Protección de Datos, los cuales pueden ser firmados electrónicamente.
Además de los anteriores derechos, en caso de que sea la base jurídica del tratamiento de sus datos
personales, también tiene derecho a retirar el consentimiento otorgado en cualquier momento mediante el
procedimiento más arriba descrito, sin que dicha retirada de consentimiento afecte a la licitud del
tratamiento anterior a la retirada del mismo, y sin que en ningún caso condicione el tratamiento de
datos personales efectuado en virtud de otra base legal. Ayuda en Acción podrá continuar tratando sus
datos personales en la medida en que la ley aplicable lo permita.
En general, respondemos las solicitudes en el plazo de un mes, aunque según la complejidad y el número,
se podría prorrogar el plazo otros dos meses más, en cuyo caso se lo notificaremos.
Finalmente, te recordamos que tienes derecho a presentar una reclamación ante la autoridad de control
pertinente.
VI. MODIFICACIONES A LA POLÍTICA DE PRIVACIDAD
Ayuda en Acción se reserva el derecho de modificar su Política de Privacidad de acuerdo con la
legislación aplicable en cada momento. En todo caso, podrá consultar cualquier modificación de la
Política de Privacidad en nuestra página Web.