Llevar agua potable a comunidades rurales como la de Cebadas, en Ecuador, genera oportunidades para crear un futuro sostenible para la población. En la actualidad, más de 200 personas cuentan con agua potable en sus casas. La puesta en marcha de un nuevo sistema de agua abre un nuevo horizonte de oportunidades, para la infancia, las mujeres y sus familias. ¡Os contamos cómo lo hemos logrado!
Cebadas y el acceso a agua potable
Cebadas formaba parte del 30% de la población ecuatoriana que carecía de acceso a agua limpia y segura. Por eso, no solo hemos construido un sistema de agua potable, sino que también capacitamos a la comunidad a través de nuestra Escuela Nacional del Agua. Queremos no solo proporcionar agua, sino también asegurarnos de que la comunidad pueda administrar y mantener el sistema de manera sostenible.
El impacto del Sistema de Agua Cebadas
Nuestra misión es hacer que el agua limpia y segura deje de ser un privilegio en Ecuador y se convierta en una oportunidad de desarrollo para las comunidades rurales. Nos enorgullece anunciar la exitosa inauguración del Sistema de Agua Cebadas en el cantón Santa Isabel, de la provincia de Azuay. Gracias a esto, más de 200 personas tienen agua potable.
Con una inversión de más de $60,000 de la Unión Europea, el Gobierno Autónomo Descentralizado de Santa Isabel y nuestro aporte como Ayuda en Acción, junto con más de 150 mingas realizadas por la comunidad, logramos la construcción de este sistema vital. Este asegura un acceso sostenible al agua potable para estas familias que han esperado más de 70 años para que este sueño se haga realidad.
El impacto transformador del acceso al agua
En diversas comunidades rurales de la provincia de Azuay hay personas que han vivido sin agua potable durante toda su vida. Consumen agua de ríos, esteros, pozos o incluso de la lluvia, fuentes que, en la mayoría de los casos, están contaminadas y provocan graves enfermedades. Cuando el agua llega limpia y segura por primera vez a sus hogares, la alegría es inmensa. Las mujeres, que solían dedicar tiempo y esfuerzo a recoger agua, ahora lo destinan a acciones más productivas, generando mayor seguridad personal y bienestar.
“Las mujeres somos las guardianas de la agüita. Gracias a Ayuda en Acción, ahora que tenemos agua potable, la vamos a cuidar para que a nuestros hijos nunca les falte”, menciona con una sonrisa Rosario Cochancela, beneficiaria del Sistema de Agua Cebadas.
Transformando el acceso al agua potable en desarrollo rural
“Estamos haciendo historia al transformar el acceso al agua potable de un privilegio a una oportunidad de desarrollo rural", afirmó Carlos Hernández, Director Nacional de Ayuda en Acción en Ecuador. “Este logro no solo asegura un suministro continuo de agua potable, sino que también fortalece la resiliencia de esta comunidad y sienta las bases para un futuro sostenible y próspero", menciona.
Detrás del Sistema de Agua Potable de Cebadas, encontramos más de 150 mingas comunitarias, la protección de más de 400 metros cuadrados de zonas de captación de agua, el compromiso de la comunidad de preservar los bosques nativos y las zonas de recarga hídrica, así como la capacitación a la Junta Administradora del Agua Cebadas a través de la Escuela Nacional del Agua de Ayuda en Acción. Además, implementamos el Software para Administración y Gestión de Agua Potable y Riego (SAPRA), desarrollado por Ayuda en Acción, que permite a las personas de la comunidad realizar una gestión transparente y técnica del agua.
Alianzas que construyen un futuro sostenible
Este proyecto se desarrolló en el marco del proyecto Mujeres Campesinas Liderando la Producción Resiliente al Cambio Climático y la Gestión Sostenible de los Recursos Hídricos en las Subcuencas de los Ríos San Francisco y Vivar (Azuay), cofinanciado por la Unión Europea e implementado por Ayuda en Acción, el Municipio de Santa Isabel, la Alcaldía de Pucará y la Universidad de Cuenca.
(*Artículo escrito por equipo Ayuda en Acción Ecuador)