Escrito el 03/04/2020
Actualización: 15/11/2020.
El coronavirus, esa palabra que monopoliza hoy nuestras vidas y conversaciones, no entiende de fronteras. Hoy te contamos cómo estamos haciendo frente a esta alerta sanitaria en Nicaragua, uno de los países menos desarrollados de América Latina. Allí contamos con dos herramientas fundamentales para que nadie se quede atrás en la lucha contra la COVID-19: agua e información.
Alerta sanitaria en Nicaragua
La alerta sanitaria del coronavirus en Nicaragua ya ha dejado en el país, según fuentes oficiales, más de 6.000 casos confirmados y 158 personas fallecidas a causa de la enfermedad COVID-19. En Ayuda en Acción trabajamos desde 1993 para acabar con la pobreza y la desigualdad en este país que, desde hace casi dos años, vive una grave crisis social y política que ha obligado a más de 100.000 personas a huir de sus hogares, según Naciones Unidas.
En Nicaragua, el acceso a los servicios básicos es un desafío constante para muchas de las personas para las que trabajamos. Por eso, nos hemos coordinado con un gran número de autoridades y organizaciones para diseñar una respuesta humanitaria efectiva ante la crisis del coronavirus en el país.
Frente al coronavirus, agua e información
Nuestra respuesta ante esta alerta sanitaria se concentra en los departamentos de Matagalpa, Jinotega y Somoto, donde apoyamos a más de 99.000 personas. Se basa en dos herramientas fundamentales que pueden salvar vidas: el acceso al agua y la información.
La información es clave
¿Qué es el coronavirus?, ¿cómo se contagia?, ¿qué medidas de prevención existe? La información veraz, adecuada y contrastada es clave para frenar esta crisis. Por eso, llevmos cabo campañas de sensibilización en las comunidades rurales donde trabajamos.
Para conseguir multiplicar el mensaje, contamoscon un aliado fundamental: la radio. A través de las ondas, damos respuesta a las principales dudas planteadas por las familias en torno a esta enfermedad: síntomas, medidas de prevención, cuándo acudir al puesto de salud… También repartimos folletos informativos y de sensibilización para las familias. Tampoco olvidamos el uso de las redes sociales para difundir campañas como #LaViolenciaEsViral, destinada a prevenir la violencia de género, una lacra que se está agravando durante la pandemia.
Acceso al agua para evitar los contagios
Está comprobado. Lavarse las manos con frecuencia es la mejor forma de prevenir el contagio por coronavirus. Sin embargo, el acceso a agua limpia y segura no siempre es fácil en las zonas rurales donde trabajamos, muy afectadas por la sequía que castiga al Corredor Seco. Por eso, tanto antes de esta crisis, como durante y después, hacemos hincapié en garantizar el derecho al agua entre las familias más vulnerables:
Promovemos la instalación de lavabos en las comunidades: no solo permiten el acceso a agua segura, sino un uso más eficiente e higiénico de este recurso.
Construimos sistemas de recogida de agua: la sequía derivada del cambio climático afecta a muchas familias. Gracias a la captación del agua de lluvia, conseguimos en 2019 que más de 2 5000 personas pudieran acceder a agua para el consumo y las labores domésticas.
Fomentamos jornadas de limpieza en fuentes de agua y proporcionamos filtros de barro a las comunidades para asegurar que el agua para el consumo sea segura.
La gestión de las basuras y aguas residuales también es uno de nuestros esfuerzos, tanto en escuelas como en hogares.
Gracias a estas medidas, personas como Suyapa pueden hacer frente al coronavirus. Ella es profesora en una escuela de Amuyacán, en Telpaneca, y cuenta cómo, gracias a Ayuda en Acción, conseguir agua ya no es un problema en su comunidad. "Antes de que esta ONG llegara, cada niño y niña debía llevar a la escuela una botella de agua con la que beber y lavarse las manos", recuerda. "Ahora ya no tenemos que estar pensando de dónde sacar el agua porque tenemos reservas, lo que será muy importante para prevenir el contagio por coronavirus", señala.
También estamos muy pendientes de adaptar nuestra respuesta a las nuevas necesidades que puedan surgir en el país tras el paso del huracán Eta, un ejemplo de cómo el cambio climático puede aumentar la vulnerabilidad de las familias afectadas por la COVID-19.
Somos Ayuda frente a las brechas de la COVID-19
Además de trabajar para mejorar el acceso al agua y a la información sobre el coronavirus, nuestra respuesta en Nicaragua también incluye:
Entrega de material y equipos sanitarios como tests COVID, EPI o medicinas.
Rehabilitación de infraestructura e instalaciones en centros de salud o unidades de vigiliancia epidemiológica.
Formación a personal sanitario.
Campañas de prevención de violencia contra los niños, niñas y mujeres en confinamiento.
Distribución de kits de higiene.
Distribución de alimentos.
Actividades educativas, recreativas y de apoyo psicosocial a infancia y familias en confinamiento.
Formación a pequeños emprendedores y emprendedoras.
Estas actuaciones permiten que las comunidades cuenten hoy con más y mejores herramientas para hacer frente a la alerta sanitaria en Nicaragua. Tamara, ingeniera agropecuaria y trabajadora de Ayuda en Acción en el país, destaca la capacidad de adaptación y superación de las familias ante la crisis. "Una de las grandes enseñanzas que he obtenido de estas personas es su capacidad de resiliencia. Pueden pasar por una gran adversidad y sufrir dolor, pero se levantan, se recuperan y continúan hasta que logran sus metas", destaca.
Ahora, más que nunca, estamos junto a las familias más vulnerables de Nicaragua para puedan hacer frente a estos tiempos que, aunque cargados de incertidumbre, son también una oportunidad para apostar por la solidaridad y los derechos humanos. No pierdas de vista nuestra web para conocer cómo estamos trabajando frente a las brechas de pobreza y desigualdad generadas por la COVID-19.