Hoy en día, la lectoescritura está considerada como una herramienta esencial para el crecimiento y desarrollo sano de la infancia. Aprender a leer aporta a los más pequeños muchas más competencias que la posibilidad de descifrar un código escrito. Su riqueza va más allá. Aprender a leer activa la mente, despierta la curiosidad y agudiza la inteligencia. También permite desarrollar otras habilidades como el esfuerzo, la concentración y la reflexión.
La educación inicial -la infantil- es el mejor momento para motivar a los niños y niñas en su interés por la lectura y la comprensión de los textos escritos. Además, la lectoescritura es fundamental para mejorar el lenguaje infantil.
Aprender a leer para poder “leer para aprender”
La motivación de las niñas y niños para aprender a leer no depende solamente del carácter personal. También influye (y mucho) el tipo de actividades que seamos capaces de ofrecerles para comenzar este apasionante camino.
Actualmente, existen multitud de recursos lúdicos innovadores y pedagógicos muy atractivos y estimulantes para la infancia, incluyendo recursos de lectoescritura. Pero para poder ofrecer estos recursos al alumnado, en primer lugar, tenemos que contar con un profesorado competentemente formado.
Pues bien, esto es lo que hemos hecho en varios centros educativos de El Salvador, concretamente en cuatro centros de Ilamatepec y Suchitlán. El programa implementado por Ayuda en Acción ha permitido formar a un total de 56 docentes en el uso adecuado de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) para desarrollar en sus centros el “Programa Causa Innovación Educativa”. Los resultados obtenidos han sido mucho más que satisfactorios. Los profesores formados en TIC han incorporado a sus aulas con gran entusiasmo las nuevas aplicaciones.
Diferencias en aprendizaje y lectoescritura: antes y ahora
Anteriormente, el profesorado de estas comunidades enseñaba a leer y escribir a sus alumnos y alumnas con metodologías tradicionales. Ahora, les enseñan a través de pizarras digitales interactivas.
Imagina una clase de lectoescritura en la que en lugar de aprender la unión de las letras y su correspondiente fonema tuvieras a tu alcance la posibilidad de jugar con las letras, con los sonidos, con las palabras... A través de múltiples recursos de animación, vídeo, audio… Esta es la esencia de la aplicación ABCDARIO que forma parte del “Programa Causa Innovación Educativa” que Ayuda en Acción ha puesto en marcha, con la colaboración del Gobierno del Principado de Asturias. Los alumnos aprenden de manera activa y al mismo tiempo, entretenida y muy amena.
Ventajas de aprender a leer con la aplicación ABCDARIO en las aulas
- Motivación: los pequeños aprenden a leer de una forma más atractiva, amena y divertida.
- Interés: las animaciones, los vídeos, los audios y ejercicios interactivos de esta aplicación aumentan el interés de los pequeños por aprender a leer.
- Interactividad: el aprendizaje es más dinámico porque permite a los estudiantes interactuar e intercambian experiencias con otros compañeros de su clase.
- Cooperación: el programa fomenta la colaboración entre los niños y niñas, lo que genera un mayor compañerismo.
- Iniciativa y creatividad: esta herramienta tecnológica desarrolla la imaginación y el aprendizaje por sí mismo.
- Comunicación: la comunicación es mucho más abierta y los niños y niñas resuelven dudas y comparten ideas con sus maestros.
El Programa Causa Innovación Educativa en El Salvador ha permitido la formación en tecnologías tanto a adultos como a infancia. Clic para tuitear
Gracias al apadrinamiento, enseñamos a leer
Aprender a leer y a escribir, enriquecer el lenguaje infantil, todo ello es primordial en la primera etapa de los pequeños. No solamente porque son competencias clave para su desarrollo académico, sino también porque son competencias estrechamente relacionadas con las relaciones afectivas de la infancia. De todo esto saben mucho los padrinos y madrinas que reciben las cartas de los pequeños que tienen apadrinados a través de Ayuda en Acción.
¡Qué necesario es aprender a leer, saber expresarse, encontrar las palabras adecuadas para describir sentimientos, contar anécdotas, exponer ideas! Como decía Samuel Johnson, “el lenguaje es el vestido del pensamiento”. Queremos seguir trabajando para que todos los niños y niñas puedan confeccionar los mejores trajes para sus pensamientos. ¿Nos ayudas?