Con la llegada del verano se nos suelen olvidar las buenas costumbres. El terraceo, las horas de sol que invitan a acostarnos un poco más tarde y la falta de ganas (o de oportunidad) para mantener nuestra rutina deportiva, son algunas de las cosas que nos impiden continuar con un estilo de vida saludable. Para Ayuda en Acción, verano y vida sana no conceptos son antagónicos. Es más, pensamos que es una de las mejores épocas del año para promocionar hábitos de vida saludable entre la infancia. ¿Quieres saber cómo? Hoy te invitamos a que conozcas las Escuelas de Verano que organizamos en la Zona Norte de Alicante con el apoyo de DKV.
Escuelas de verano 2021: nuestro ingrediente contra la obesidad infantil
Adam, Jamela y Manuel lo tienen claro: les encantan las Escuelas de Verano. No les importa volver a su cole durante el mes de julio porque se lo pasan en grande con sus compañeros y compañeras. Sin embargo, no son conscientes de que detrás de cada juego se están llevando aprendizajes que les acompañarán toda su vida.
“Estamos aprendiendo que la fruta es más saludable que el chocolate. El chocolate tiene más azúcar y se nos pueden caer los dientes” (Jamela, 10 años).
“Las Escuelas de Verano posibilitan a nuestro alumnado que salga de casa, se airee, se lo pase bien, se relacione con otros compañeros y compañeras, mientras aprenden a tener una vida más sana” (David García Excusa, director del CEIP Monte Benacantil de Alicante).
Para ello utilizamos dinámicas y juegos como gymkanas donde aprenden a seguir una dieta sana y equilibrada, hábitos de higiene y pierden el miedo a consumir fruta y verdura. A media mañana siempre tienen un almuerzo saludable: “a veces toca bocadillo o yogur y, otras, manzana, pera o melocotón”, nos desvela Adam, de ocho años. Completan su jornada con juegos de agua –sus favoritos– y deporte, solo cuando Lorenzo no aprieta demasiado. Un día a la semana tienen una actividad sorpresa, quizá la más especial fue la visita a la playa de Muchavista (Campello, Alicante) donde practicaron paddle surf.
“Para mí es muy importante que mi hija Lidia aprenda a comer bien y estoy muy contenta de que esté participando en las Escuelas de Verano. En casa cuando le doy fruta la rechaza porque no le gusta, pero aquí –como ve a otros niños y niñas– ella se la come” (Malha Touzeri, madre).
Aprendizajes que van más allá
Manuel, de 12 años, destaca otra de las claves de nuestras Escuelas de Verano. “Mis padres están muy contentos porque aquí no estoy todo el día en la calle al sol. Aquí estoy con mis amigos y a la vez estoy aprendiendo a jugar en equipo y a tener iniciativa”. Y es que no solo les enseñamos los secretos para mantener una vida sana, sino que también aprenden valores como la convivencia, el respeto, el trabajo cooperativo o a resolver conflictos.
“La Zona Norte de Alicante está compuesta por una serie de barrios que se caracterizan por su multiculturalidad. Por ello, otro de los objetivos que perseguíamos con la puesta en marcha de esta actividad era promover la convivencia, ofreciendo a la infancia un espacio de ocio donde compartir y servir de ejemplo al resto del barrio” (Beatriz Pacheco, Ayuda en Acción).
Una alternativa de ocio
Una de las principales dificultades que se enfrentan las familias de la Zona Norte es la escasez de oferta de ocio gratuita para niños y niñas. Muchas de ellas se encuentran además con el hándicap de no disponer de amistades o familiares a quien acudir para dejarles al cuidado de sus hijos mientras trabajan –en su mayoría con contratos inestables o en el empleo informal–. En el caso de los padres y madres que están desempleados, supone una oportunidad para acceder a empleos durante la época estival. Por ello, desarrollamos esta actividad de lunes a viernes de 9 a 14 horas en su centro educativo: el CEIP Monte Benacantil.
“La mayoría de las familias de nuestro colegio no tienen conocimientos adquiridos y asimilados en hábitos de vida saludable. Las escuelas de verano nos permiten que los niños y niñas de nuestro centro puedan acceder a este conocimiento en igualdad de oportunidades” (David García Excusa, CEIP Monte Benacantil).
Alianzas para combatir la obesidad infantil
Según la OMS, la obesidad infantil afecta al 20% de las niñas y las niños en España. Estas cifras, lejos de disminuir, aumentan año tras año especialmente entre la infancia que se encuentra en riesgo de pobreza y exclusión social.
Nuestras Escuelas de Verano se encuentran enmarcadas en una línea de trabajo más amplia con la que buscamos prevenir la obesidad infantil en los barrios de la Zona Norte de Alicante y el distrito de Cerro-Amate en Sevilla. Este proyecto, que es posible gracias al impulso de los Agentes Solidarios de DKV, tiene como objetivo mejorar la alimentación y promover los hábitos de vida saludable entre más de 500 niños y niñas y sus familias a través de talleres que se desarrollan durante el curso escolar y becas de comedor.