Propiciamos el acceso a una educación de calidad. Lo hacemos principalmente impulsando el desarrollo de competencias STEAM y nuevas tecnologías de la información TIC a estudiantes y docentes, así como promoviendo la innovación educativa con robótica para lograr un aprendizaje igualitario que facilite la autonomía y resolución de conflictos basada en el diálogo.
Generamos oportunidades a través del empleo y emprendimiento en jóvenes y mujeres víctimas de violencia. Promovemos, además, su formación técnica, el acceso a medios de vida y la mejora de competencias empresariales para el acceso al mercado.
Asimismo, trabajamos para la eliminación de cualquier tipo de discriminación a través del empoderamiento económico a mujeres, jóvenes y pueblos indígenas, construyendo espacios seguros libres de violencia donde se promueva la convivencia pacífica y la solidaridad. Damos herramientas para que sean capaces de defender sus derechos frente a todo tipo de violencia, particularmente de género. Además, facilitamos el acceso a asistencia psicosocial, jurídica y mecanismos de restauración de vida de víctimas de violencia basada en género.
Apoyamos a comunidades y personas para reducir la vulnerabilidad de sus medios de vida frente a los efectos del cambio climático.
Por último, proporcionamos una respuesta efectiva a personas víctimas de crisis humanitarias, como la generada como consecuencia de la pandemia de la COVID-19, con el desarrollo de capacidades de resiliencia. Brindamos asistencia alimentaria y de recursos no alimentarios como agua, saneamiento, reparto de kits sanitarios, alineamiento en emergencia, atención psicosocial, puestos de lavado de manos y equipamientos para la atención hospitalaria.