El 45% de los niños menores de cinco años de Cabo Delgado (al norte de Mozambique) padece desnutrición crónica, según datos del informe sobre los principales indicadores sociodemográficos de la provincia (UNICEF 2022). Además, 22 054 mujeres embarazadas o lactantes están en situación de desnutrición aguda, lo que contribuye al deterioro del desarrollo motor y visual y bajo peso al nacer, entre otras.
Este desafío se genera, entre otros factores, por los bajos ingresos para acceder a alimentos más enriquecidos y el escaso acceso de las mujeres a la atención de la salud durante el embarazo y el puerperio. Por eso desde Ayuda en Acción nos hemos propuesto dar apoyo en el fomento de la producción agropecuaria y la nutrición a más de 4500 personas en Namuno.
¿Cómo lo conseguimos? Nuestros equipos están fortaleciendo la salud comunitaria con énfasis en la salud sexual y reproductiva, por un lado, y con el aumento del acceso al agua potable por otra, a través del programa MESANA (Mejora de la Seguridad Alimentaria y Nutricional), que desarrollamos en alianza con Comagre y Wiwanana con financiación de AACID. El 53% de todas las personas a las que llega el proyecto son mujeres.
El proyecto centra sus acciones en la asistencia técnica y la dotación de insumos a agricultores con varios objetivos:
- promover la producción y la productividad.
- vincular a mercados con el objetivo de aumentar ingresos familiares.
- dar educación nutricional.
- acercar los servicios de salud a las comunidades a través de brigadas móviles.
- organizar ferias de salud y derivar casos de desnutrición a las unidades de salud.
- mejorar el acceso al agua potable con la construcción de pozos de agua.
Rosema ha recibido educación nutricional para sus siete hijos
Rosema Abília es residente de Hucula, en el distrito de Namuno. Tienen siete hijos, el menor de tan solo un año. Hace un año se sumó a las sesiones de educación nutricional en las que, según ella, aprendió nuevas formas de preparar las comidas para su familia.

“Veo que mis hijos crecen bien y se desarrollan mejor. Noto una diferencia entre los niños que tuve antes y este más pequeño, al que le he estado dando papilla enriquecida. Ese conocimiento lo adquirimos con las matronas y también lo he transmitido a otras mujeres en conversaciones cuando vamos a buscar agua”.
En las sesiones de educación nutricional las comunidades aprenden a utilizar productos disponibles localmente en combinación con otras fortificadas para preparar comidas ricas en nutrientes que van destinadas a mujeres embarazadas y menores de cinco años. “Con el proyecto hay mejoras en la nutrición de los niños y niñas de nuestra comunidad, así como una mejor percepción de las madres sobre la necesidad de acudir al hospital para el control prenatal, para el parto y otros cuidados”, explica Ermelinda Ntchoro, matrona de Hucula. En el mismo lugar se realizan actividades de fomento de la producción y productividad agrícola, como el cultivo de soja, para incrementar los ingresos de las comunidades.
Amane Eduardo, un agricultor con nuevas herramientas para seguir creciendo
Amane Eduardo se inició como productor agrícola en su niñez. Siempre ha producido maíz, sorgo, maní, arveja y yuca para el consumo familiar. Hoy, a sus 38 años, decidió incorporarse al cultivo de soja, incentivado por los técnicos de MESANA, como una forma de incrementar sus ingresos. “Espero poder producir mucho y tener más ingresos. Con el seguimiento recibido a través del proyecto he aprendido nuevas técnicas que me ayudan a no desperdiciar recursos, como por ejemplo, sembrar en hileras con las medidas adecuadas, permitiendo un mejor desarrollo del cultivo”, destaca Amane.
“Antes producía ajonjolí para vender. Decidí unirme a la soja la temporada pasada porque me di cuenta de que es más rentable y gasta menos dinero de inversión. Los técnicos nos brindan información más y ayuda a la producción de manera organizada, lo que genera más productividad. Tenemos más seguimiento, con mayor frecuencia, que antes no sucedía”, concluye Orlando Miguel, productor que cultiva soja en un área de una hectárea.
(*Artículo escrito por Safira Gil, responsable de comunicación de Ayuda en Acción en Mozambique y editado por Noemí García Cabezas, del departamento de comunicación y contenidos en sede central)