¿Te imaginas tener 12 años, vivir en una isla y no saber nadar? Qué duro suena, ¿verdad? Pues esto es lo que les pasaba a los alumnos de 5º y 6º de primaria del CEIP Pintor Joan Miró de Mallorca. Apenas se atrevían a meterse en el agua porque no eran capaces de mantenerse a flote. Pero este año tenían un reto: conseguir nadar para participar en la excursión de fin de curso.
Los profesores de natación, Tamara y Nofre, no lo tenían fácil. “Uno de los primeros obstáculos era comenzar a enseñar a nadar a niños de más de 10 años que nunca han tenido oportunidad de defenderse en el agua. Muchos de ellos se sentían muy inseguros al meterse en el agua y esto fue uno de los principales retos que tuvimos que superar. Pero a nosotros nos motivaba mucho las ganas con las que venían a clase aun sabiendo la dificultad a la que se enfrentaban”.
Para que los niños y niñas pudieran aprender era importante que se sintieran seguros con sus profesores. “Crear un vínculo de confianza con los niños y niñas fue tan importante como enseñarles la técnica para nadar. Conocer al grupo y sus características y las necesidades individuales que presentaba y esto facilitaba el aprendizaje. Ha sido una gran enseñanza ver el compañerismo que se ha vivido en este grupo en el que se mezclan nacionalidades y personalidades tan diferentes y dispares.”.
El objetivo de esta iniciativa iba más allá de la enseñanza de la natación, suponía además adquirir valores, hábitos, destreza y habilidades que permitirán a los niños y niñas desarrollarse como personas.
“Querer es poder. Este proyecto nos ha enseñado cómo las ganas de aprender supera a los miedos que tenemos presentes. Saber que habían logrado su objetivo y que se iban a ir de viaje de fin de curso con la seguridad de que podían nadar sin ningún problema fue muy gratificante, de hecho creo que nuestra alegría fue incluso mayor que la suya porque hemos sido conscientes de la dificultades que han ido superando paso a paso”.
Nofre y Tamara han ayudado a cambiar la realidad de un grupo de niños y niñas. “Sin duda ayudas como la que se ha puesto en marcha con estos dos grupos que favorecen el desarrollo de la infancia en igualdad de condiciones son muy necesarias. Tener la oportunidad de participar en un proyecto como este ha sido muy gratificante”.
La excursión de fin de curso de los niños y niñas del CEIP Pintor Joan Miró ha sido un éxito, y los pequeños solo tienen palabras de agradecimiento para sus profesores. Todos han podido disfrutar de chapuzones en el agua con la seguridad de que ya saben nadar.
Ante la creciente desigualdad, oportunidades para todos
Ayuda en Acción, a través de su programa Aquí también, trabaja en el CEIP Pintor Joan Miró desde 2013 apoyando a los niños y las niñas y sus familias en diferentes ámbitos: apoyo a las familias para el comedor, dinamización de patio, campamentos de verano, salida escolar anual, piscina, huerto escolar, GEN10S, biblioteca… La excelente labor que realizan sus educadores le llevó a conseguir el premio Bartomeu Picornell a la mejora de la calidad educativa en el año 2016. En el curso 2018/2019 se ha convertido en el primer centro educativo público de Baleares que integre primaria y secundaria.
Cuando el acceso a las actividades se realiza en igualdad de condiciones, no solo se benefician los niños y niñas que participan, sino toda la sociedad.
La actividad de piscina que los alumnos de este centro escolar pudieron realizar durante el curso 2017-2018 formó parte del proyecto Viu el barri (vive el barrio), y para ponerla en marcha se contó además con el apoyo de la Conselleria de Serveis Socials i Cooperació. Fue posible gracias a las ayudas a proyectos sociales con cargo al IRPF que las Comunidades Autónomas gestionaron en esa edición por primera vez.
Ayuda en Acción lleva desde 1981 trabajando en África, Asia y en América Latina y desde 2013, también trabaja en España. A través de su programa Aquí también apoya a la infancia, adolescencia y familias en riesgo de exclusión y pobreza.