La 52º Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) de 2022 ha sido presentada bajo el lema “Juntos contra la desigualdad y la discriminación”. Desde Ayuda en Acción aplaudimos este lema, pero queremos que en estos días se ponga en valor el potencial de la infancia, la adolescencia y la juventud y se aborden los problemas que sufren.
En este sentido, el director de Ayuda en Acción en Perú, William Campbell, que participará en el acto Diálogo de los Jefes de la Delegación y representantes de la Sociedad Civil durante este 6 y 7 de octubre, espera que la Asamblea de la OEA sirva para poner en agenda la “transición de la escuela al trabajo”. “El abandono escolar es lo que más limita el tránsito a un empleo decente y por eso es ahí donde Ayuda en Acción pone la mayoría de sus esfuerzos”, explica.
Preocupación por el abandono escolar
Ante esta Asamblea de la OEA, desde Ayuda en Acción mostramos nuestra preocupación por la calidad y la permanencia en el sistema educativo, que sigue siendo un grave problema en América Latina y el Caribe. Ya antes de la pandemia se estimaba que 14 millones de niñas, niños y adolescentes de entre 7 y 18 años estaban fuera del sistema educativo. La situación es más crítica en el nivel secundario, donde, según UNICEF, 2,8 millones de niños, niñas y adolescentes abandonan la escuela secundaria inferior y 7,6 millones lo hacen en secundaria superior. A las deficiencias propias del sistema educativo, en el caso de niñas y adolescentes se unen otros factores como embarazos forzados o precoces o la responsabilidad en los cuidados domésticos. En la región, cerca del 36% de las niñas abandona sus estudios por estas razones que se vieron incrementadas durante la pandemia.
“Todo esto ha afectado aún más a Perú, que fue uno de los países más afectados por la pandemia, tanto a nivel de aprendizaje como a las ratios de abandono escolar, que se han incrementado para poder cubrir las necesidades económicas familiares”, señala William Campbell.
Además, como consecuencia y causa del abandono escolar, según la OIT y UNICEF, 8,2 millones de menores de entre cinco y 17 años trabajan en América Latina y el Caribe. El trabajo infantil está presente tanto en las zonas rurales como en las urbanas, y el 48,7% se encuentra en el sector agrícola. Más del 50% realizan trabajos peligrosos para su salud, educación y bienestar.
Recomendaciones para la OEA
Ante estos graves problemas y la celebración de la Asamblea de la OEA, desde Ayuda en Acción proponemos las siguientes acciones:
- Los Gobiernos deben reforzar los sistemas educativos públicos, aumentando los recursos disponibles y orientando sus políticas educativas hacia la construcción de escuelas resilientes, capaces de responder a crisis como la de la COVID-19 y que garanticen la continuidad del proceso educativo de todo el alumnado.
- Establecer una mayor vinculación entre los entornos educativos y laborales, fomentando un mayor acercamiento de los sistemas educativos a las necesidades y realidades de las y los jóvenes y las demandas económicas y sociales.
- Involucrar en este proceso a toda la comunidad educativa, siendo la infancia y la adolescencia protagonista de su propio desarrollo.
- La digitalización necesaria en todos los ámbitos (educativo, medioambiental, productivo…) debe realizarse teniendo en cuenta a las poblaciones, administraciones y empresas locales, para que dicha digitalización pueda enfocarse a la implementación de una mejora social y productiva en las áreas más empobrecidas y remotas, elaborando sistemas accesibles.