Entre los días 18 y 19 de mayo se ha celebrado en Esquipulas (Guatemala) el “Foro trinacional: migración y desplazamiento forzado en los municipios de la región del Trifinio (Honduras, El Salvador y Guatemala). La iniciativa forma parte del proyecto que tiene por objetivo poner en valor el derecho a una vida digna a través del fortalecimiento de perspectivas de permanencia en los países de origen.
Uno de los propósitos del evento es la contextualización de la migración y el desplazamiento forzado en los países del Triángulo Norte frente a los desafíos y mandatos asumidos por los gobiernos en la región en el marco del Pacto Mundial para una migración segura, ordenada y regulada. Además, tiene como finalidad hacer un análisis sobre la ausencia de marcos jurídicos regionales /intrafronterizos y nacionales como factores detonantes en la violación de los derechos humanos de las personas desplazadas por violencia interna.
El encuentro ha reunido a expertos/as en materia de migración además de a personas trabajadoras de Ayuda en Acción de los tres países participantes, así como de otras organizaciones de derechos humanos que trabajan en asuntos migratorios. En total, han asistido 120 personas de 12 municipios de la región, además de 53 actores de gobiernos locales y estatales y de organizaciones de la sociedad civil.
Aumento de flujos migratorios
Las condiciones de vida cada vez más complicadas en el norte de Centroamérica están contribuyendo a un aumento de los flujos migratorios. Históricamente, la violencia de pandillas y de género, la pobreza, la inseguridad y el cambio climático han sido la causa de que más de 712 000 personas cada año sean desplazadas interna y externamente en Honduras, Guatemala y El Salvador. Estos factores no cambiaron durante la pandemia por COVID-19, de hecho, muchos empeoraron según las cifras para el 2021.
A pesar de los esfuerzos que gobiernos y organizaciones de la sociedad civil están realizando para frenar la migración y el desplazamiento forzado, las cifras no han dejado de aumentar en el Triángulo Norte de Centroamérica. Esto puede evidenciarse en las caravanas o flujos migratorios mixtos recientes. Se trata de una situación que afecta a hombres, mujeres (en su mayoría, jóvenes), niños y niñas no acompañados, familias, población LGTBIQ+ entre otros colectivos, siendo los más expuestos a violaciones de sus derechos y todos los riegos que conlleva la migración irregular.
Más inseguridad para las personas migrantes
El deterioro de las condiciones de seguridad en estos países tiene como causa y consecuencia diversos contextos de violencia, extorsión, sicariato o narcotráfico. Así mismo, aumenta la desigualdad social, el desempleo, la pobreza extrema, la inestabilidad económica y política al tiempo que los efectos de la sequía son cada vez más graves (inseguridad alimentaria, deterioro de los ecosistemas, entre otros. Todo ello empuja a la población a una migración irregular y un desplazamiento forzado que han sido analizados en el encuentro durante varios días: “el derecho a la vida, a la dignidad humana, a la libertad, la seguridad o la salud son afectados por esta situación”, señalaban diversos participantes durante las jornadas del Foro Trinacional.
Falta de reconocimiento de migrantes como titulares de derechos
Una de las principales conclusiones a las que se ha llegado durante los días de celebración del foro es la falta de reconocimiento como titulares de derechos a las personas migrantes: “la magnitud del fenómeno migratorio vulnera los derechos fundamentales y causa sufrimiento”, señalan al mismo tiempo que se exigen recursos, regulación legal y voluntad política que pueda ser aprovechados por las personas migrantes, tanto en su proceso de migración como en el de retorno, si lo hubiera.
Jorge Herrera, responsable de migraciones en Ayuda en Acción El Salvador reconoce la migración como un derecho, pero señala también el derecho a no migrar: “en esta región la mayoría de migración es forzada porque no hay fuentes de empleo, no hay un desarrollo económico integral provocando desigualdad en la sociedad. Lo ideal es generar oportunidades locales para que las personas tengan esa diversidad en un ecosistema de equilibrio”.
En cuanto a las acciones necesarias para abordar este tema en la región, se ha apuntado en el Foro Trinacional a la creación de políticas orientadas a programas, así como a iniciar acciones que inviten a una mayor profundización de estudios sobre este tema.
Financiadores de la iniciativa
El proyecto que ha dado origen a la celebración del Foro trinacional sobre migraciones está financiado por el Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) a través de Arbeiter Samariter Bund (ASB). Ha sido implementado por Ayuda en Acción en El Salvador, Guatemala y Honduras junto a sus organizaciones socias (Instituto Salvadoreño del Migrante, Pastoral de Movilidad Humana de Guatemala y Organismo Cristiano para el Desarrollo Integral de Honduras).