En España la pobreza impide a 700.000 hogares llevar a cabo una alimentación saludable, lo que afecta a más de 230.000 menores de 16 años y a casi 340.000 jóvenes que no pueden comer alimentos básicos y necesarios para su desarrollo físico e intelectual (como son la proteína animal o el pescado) al menos tres veces por semana. Es verano pero la pobreza, sin embargo, no se va de vacaciones.
Esta es una de las razones por las que desde el programa Aquí también de Ayuda en Acción seguimos apoyando a infancia y juventud en riesgo de exclusión a través de actividades como los campamentos gastronómicos que hemos puesto en marcha durante este verano en Madrid y Palma de Mallorca.
Entre uno y otro, casi 30 jóvenes de edades comprendidas entre los 14 y los 18 años han asistido a talleres en los que han conocido las propiedades de los alimentos, han aprendido a cocinar nuevas recetas y han trabajado en equipo con un grupo al que les unen perfiles, intereses, preocupaciones y sueños de futuro.
La Mejor Receta para crear una sociedad mejor puede contener muchos ingredientes: la formación, la ilusión, la tolerancia, el trabajo en equipo, etc. La empresa LIDL, a través de su colaboración con Ayuda en Acción, añade uno muy importante: la ayuda. Y es que todos y todas #somosayuda y a la vez la necesitamos.
Con su colaboración desde hace años, LIDL hace posible la realización de los talleres Cocinando habilidades, destinados a jóvenes y familias, y donde se les enseña a llevar a cabo una alimentación saludable con pocos recursos, a la vez que se fomenta la empleabilidad de quienes participan en ellos. En esta ocasión, los talleres cuentan con la colaboración de la Fundación La Casa y el Mundo y la Asociación MASI en Madrid, y de Clandestí Taller Gastronòmic y el Centro de Servicios Sociales Gregal (Ayuntamiento de Palma) en Mallorca.
En el caso de los campamentos de verano gastronómicos, los talleres Cocinando habilidades tienen como objetivo poner en contacto a jóvenes con el mundo culinario desde los fogones de una cocina profesional, para que así desarrollen habilidades y hábitos en su vida personal, mientras descubren y conocen un posible ámbito formativo y laboral.
No solo se trata de cocinar
Chicos y chicas del barrio de Los Cármenes (en Madrid) y de Son Gotleu (en Palma) participan en estos talleres durante los meses de junio y julio: trabajan en equipo y aprenden sobre alimentación saludable, se divierten cocinando y conocen una profesión a la que, por qué no, dedicarse en un futuro no tan lejano. Jóvenes de barrios estigmatizados y con cierta problemática social están adquiriendo herramientas que sin duda les permitirán mejorar su autoestima y autonomía de cara a una mejor inserción sociolaboral.
Pero no solo se ha tratado de cocinar: están conociendo nuevos alimentos disfrutando incluso de la posibilidad de ir al mercado o conocer grandes empresas de restauración desde dentro. Todo ello lo compartirán, sin ninguna duda, una vez lleguen a casa, donde su familia podrá también adquirir nuevos y saludables hábitos de alimentación gracias a los aprendizajes de estos chicos y chicas. Es uno de los componentes básicos de este proyecto, el hecho de poder trasladar al ámbito familiar los aprendizajes obtenidos y comenzar a aplicarlos en sus respectivos entornos, mejorando sus hábitos alimenticios y generando así mejores condiciones de vida en la población más vulnerable.
También, por supuesto, hay momentos para celebrar, y nada mejor que hacerlo con los aprendizajes obtenidos a lo largo del tiempo que se prolongan los talleres: ofreciendo sus platos al resto de compañeros y compañeras, a sus educadores/as y al profesorado que le ha acompañado todo este tiempo y sobre todo, compartiendo momentos con nuevas amistades forjadas gracias al proyecto.