Autor: Isabel Neila Boyer
Impulsar el emprendimiento femenino y la empleabilidad para la generación de ingresos que ayuden a superar las desigualdades y atajar el riesgo de exclusión social no es una tarea fácil, pero es el objetivo que se ha marcado Ayuda en Acción en este curso 2017/2018 dentro de su programa Aquí también; programa de apoyo a la infancia, adolescencia y familias en situación de vulnerabilidad y riesgo de exclusión social. El proyecto Hilvanando culturas, confeccionando el futuro arranca un año más gracias a Fundación Bancaria La Caixa y a otras entidades públicas colaboradoras, como el Centro Aragonés de Diseño Industrial (CADI) o empresa (Benefit), y lo hace con una treintena de mujeres integrantes de 2 talleres de costura formados en 2 CEIP de la ciudad de Zaragoza: CEIP Ramiro Soláns y CEIP Joaquín Costa. Este proyecto, que además cuenta como contraparte implementadora con la Fundación San Ezequiel Moreno, se desarrolla en las instalaciones de ambos centros educativos con la intención, además, de que las familias vayan integrándose en la comunidad y en la vida escolar.
Hilvanando culturas, confeccionando el futuro es una iniciativa de carácter social que cuentan con ocho años de historia, en el caso del CEIP Ramiro Soláns, y tres en el caso del CEIP Joaquín Costa. Tiempo durante el cual la población escolar de ambos centros y el perfil sociodemográfico de los barrios han ido sufriendo una importante transformación debido al creciente fenómeno migratorio y la crisis económica. Hechos que han condicionado la heterogeneidad de ambos grupos de mujeres para dar cabida, actualmente, a participantes de diferentes etnias y nacionalidades.
Si bien, en sus comienzos, el origen étnico y los lazos familiares marcaron el carácter endogámico uno de los grupos, estos se han ido abriendo gracias al trabajo de integración constante desarrollado por las monitoras y los centros educativos. De este modo, el desafío original que representaba la mistura y multiculturalidad se ha tornado en un valor, reconociéndose por parte de todas las integrantes el ser éste un espacio de compañerismo y cooperación donde, además de aprender confección, se comparten valores de solidaridad y adquieren habilidades sociales.
Durante los últimos tres cursos escolares se ha ido consolidando una metodología de trabajo basada en estos principios, así como en la responsabilidad y el respeto a la diferencia. Todo lo cual ha generado una dinámica donde, sobre las importantes y necesarias destrezas con la aguja, prima el compartir inquietudes y alegrías cotidianas, la construcción de expectativas de futuro y un tiempo y lugar que refuerza la autoestima y constituye, para muchas de ellas, el único espacio de socialización fuera del hogar y el entorno doméstico.
De este modo, Ayuda en Acción trabaja para fomentar la integración de las mujeres, madres del alumnado en situación de vulnerabilidad y riesgo de exclusión social, a través de la promoción de un espacio de encuentro y aprendizaje colaborativo en torno a la costura orientado a la generación de recursos (micro-emprendimiento, cooperativismo femenino, etc.). Además, con estos talleres, tratan de paliar las discriminaciones que sufren estas mujeres por el simple hecho de serlo y tener asociada a su condición de género la variable étnica siendo, en muchas ocasiones, objeto de doble discriminación y sujetos de marginalidad debido a su pertenencia a minorías étnicas minusvaloradas socialmente.
Ambos talleres, y la iniciativa de emprendimiento femenino que Ayuda en Acción está impulsando (gracias a la colaboración de otras entidades), abren la puerta a la superación de las dificultades que para la inserción laboral encuentran estas mujeres, viendo la oportunidad (con un acompañamiento apropiado) de desarrollar una experiencia de generación de ingresos que les ayude en su integración social. De momento, su participación en los talleres de costura les ha servido para ajustar gastos dentro de las difíciles economías domésticas de sus familias pero, además, para participar en las actividades sociales y de los centros, fomentándose, de este modo, su integración en la comunidad escolar y a nivel social. Así, este proyecto está ofreciendo, también, un espacio que les permite interrelacionarse con otras mujeres de su entorno, con las que comparten o no un origen cultural, que fomenta el conocimiento de otras realidades culturales femeninas y la creación de redes sociales al margen de las diferencias étnicas.