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En la provincia de Cabo Delgado, al norte de Mozambique, cerca de 700 jóvenes, tanto hombres como mujeres, han completado cursos de formación profesional como parte del proyecto Recuperación de la Crisis del Norte (NCRP). El proyecto busca capacitar a más de 3000 jóvenes entre 18 y 35 años.
Generando oportunidades a través de la formación profesional
Estos cursos, que abarcan una amplia gama de habilidades, les brindarán la oportunidad de generar autoempleo y mejorar su inserción en el mercado laboral, en una región afectada por el terrorismo y el desplazamiento. El proyecto NCRP, financiado por el Banco Mundial y coordinado por la Oficina de Servicios para Proyectos de las Naciones Unidas (UNOPS) y el Fondo Nacional para el Desarrollo Sostenible (FNDS), en colaboración con Ayuda en Acción y Espaço Livre da Juventude (ELS), se enfoca en empoderar a los jóvenes en los distritos de Cabo Delgado.
Fortaleciendo el futuro de la juventud
El objetivo es fortalecer la capacidad de respuesta y adaptación de los jóvenes ante los desafíos cambiantes, promoviendo su desarrollo y generando oportunidades económicas sostenibles. Durante la ceremonia de clausura de los cursos y la entrega de kits de autoempleo, Luís Almeida, coordinador de proyectos de Ayuda en Acción, subrayó la visión de la organización de fomentar el desarrollo juvenil a través de la creación de mercados resilientes, independientes de apoyo externo constante.
Compromiso con el desarrollo sostenible
Por su parte, el representante de UNOPS reafirmó el compromiso de la organización de apoyar al Gobierno de Mozambique y promover la cohesión social en la región. Los graduados, provenientes en su mayoría de áreas afectadas por el terrorismo y el desplazamiento, ahora cuentan con habilidades en áreas como agricultura, avicultura, carpintería, plomería, comercio, costura, cocina, electricidad, motomecánica y albañilería.
Transformando vidas y comunidades
Estos conocimientos les permiten generar ingresos para su autosostenimiento y el de sus familias, contribuyendo así a la recuperación de la comunidad. "Con esta formación aprendí a coser prendas como pantalones y vestidos. Con el kit que recibí, podré generar ingresos para mantener a mi familia y ayudar a la comunidad con mis habilidades en costura", compartió Cristina Hilário, una graduada en corte y costura del distrito de Montepuez. Por su parte, Doclas Fabião, estudiante de electricidad del distrito de Balama, expresó su gratitud por los conocimientos y materiales adquiridos, lo que le permite ayudar a su comunidad y aspirar a su sueño de trabajar en Electricidade de Moçambique.
Un futuro más prometedor
El proyecto de formación profesional en Cabo Delgado, NCRP, planea capacitar a más de 3.000 jóvenes entre 18 y 35 años, especialmente aquellos afectados por el terrorismo y el desplazamiento, para mejorar sus medios de vida y contribuir al desarrollo sostenible de la región. El compromiso con la juventud y la creación de oportunidades duraderas demuestran cómo la formación profesional puede ser una fuerza transformadora en un entorno desafiante.
