Victoria es una de las voluntarias que durante este último verano han realizado un voluntariado internacional con Ayuda en Acción. Llegó a Ayuda en Acción desde A Coruña, con curiosidad, interés y, sobre todo, ganas de cambiar el mundo. Fue una de las estudiantes seleccionadas para realizar una estancia de cooperación en un país en desarrollo, a través de las becas que ofrece la universidad dentro de la iniciativa de proyectos de conocimiento de la realidad (PCR). En El Salvador ha estado en Conchagua, donde Ayuda en Acción desarrolla un proyecto centrado en Protección de los Derechos de la niñez y la adolescencia en contextos vulnerables. Allí ha trabajado de la mano de nuestros equipos para aportar su conocimiento y experiencia en las escuelas de ciudadanía para la promoción de los derechos de la infancia y las escuelas socio deportivas para la promoción de valores a través del deporte. Hoy, nos cuenta su experiencia en el país. ¡No te lo pierdas!
Voluntariado internacional: testimonio desde El Salvador
Hace ya casi dos meses que comencé esta aventura. Si miro atrás ahora mismo, no hubiera llegado a imaginar todo lo que habría crecido, resuelto y vivido en esta etapa tan bonita y tan enriquecedora que, ahora, llega a su fin.
Desde que llegué puedo decir que me he sentido una más: he participado en todas las actividades que se han planteado y he apoyado en la elaboración de materiales para la impartición de talleres en las escuelas de ciudadanía. Son un elemento fundamental para que nuestra infancia y juventud sea consciente de sus derechos y los reclame. Semana tras semana he visto cómo los chicos y chicas adolescentes que forman parte de estas escuelas hacían más preguntas y se sentían más implicados con el proyecto.
Además de esto, he tenido la oportunidad de dinamizar formaciones sobre violencias basadas en género a mis compañeros y compañeras de proyecto en las escuelas sociodeportivas que Ayuda en Acción tiene en El Salvador. Sin duda ha sido una experiencia muy interesante poder dar formación a otros iguales.
Las personas, lo primero
Si hablamos de las personas, destacaría la capacidad de acogida y de cercanía. Cuando íbamos a alguna de las comunidades donde trabaja Ayuda en Acción, aun no teniendo recursos, las familias siempre nos tendían la mano para ofrecernos algo.
Aquí los días pasan rápido… A las 6 de la mañana suena el despertador, “agarro” el bus y voy directa a la oficina. Desde allí planeamos el día. Muchos de ellos hay salida de campo, otros talleres, luego un almuerzo, preparación de materiales, reuniones…
Todas las personas con las que me he encontrado en el camino me han ayudado, me han dedicado su tiempo y siempre han compartido conmigo una plática sin importar el tiempo.
Ya casi cuando estoy acabando mi experiencia no me quedan más que palabras de agradecimiento, empezando por las personas comerciantes, de restaurantes, de tiendas de Conchagua, que me veían perdida la primera semana. Han sido hogar para mí estos dos meses, les llevo en el corazón.
¿Qué supone una experiencia de voluntariado?
Considero este tipo de experiencias muy enriquecedoras, no solo desde el punto de vista personal, sino también a nivel formativo. Con el voluntariado internacional de Ayuda en Acción se tiene la oportunidad de apoyar en un ámbito normalmente relacionado con lo que se ha estudiado, así como de conocer cómo en otro país muy diferente al tuyo, trabajan y actúan de formas diferentes, y aprender de ellas.
A nivel personal, cada día te enfrentas a nuevas situaciones a las que tienes que adaptarte para poder seguir. Yo hoy puedo decir que me siento mucho más segura de mí misma. He sentido que se ha depositado una confianza y un cariño que hace que funciones mejor y mires hacia adelante con más convencimiento de que tu trabajo está sirviendo a otras personas.
Recomiendo muchísimo este tipo de estancias a cualquier persona que le interese y pueda. Aunque tengas algo de miedo y vértigo, ¡hazlo!