Más de ocho millones de estudiantes no universitarios están regresando estos días a las aulas que, por primera vez desde 2020, comienzan sin restricciones derivadas de la pandemia de la COVID-19. Si en anteriores cursos las principales novedades estaban vinculadas a la pandemia, el inicio del curso 2022-2023 comienza con importantes novedades en todo el ámbito nacional.
La implantación de un nuevo currículum en los cursos impares de Educación Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato y 1º de Formación Profesional Básica (FPB), conforme a la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), se caracteriza por dar más peso a la adquisición de competencias, introduciendo el concepto de competencias clave que ya se viene utilizando en el aprendizaje permanente de las personas adultas.
Competencias clave y creación de la figura de coordinador/a de bienestar y protección
Se introduce también este nuevo curso la figura del coordinador o coordinadora de bienestar y protección en los centros educativos. Su objetivo es prevenir, detectar y actuar frente a indicios de abuso y maltrato, acoso escolar, ciberacoso, acoso sexual, violencia de género, violencia doméstica, suicidio, autolesión y cualquier otra forma de violencia entre niñas, niños y adolescentes.
Además de estas novedades estatales, algunas Comunidades Autónomas introducen novedades como la unificación de la fecha de inicio de curso para todas las etapas educativas no universitarias, el refuerzo de las unidades de orientación, la oferta gratuita de plazas para cursar el primer ciclo de Educación Infantil (cero a tres años), o la reducción de la ratio de estudiante-docente, especialmente en el segundo ciclo de Educación Infantil.
Las familias, especialmente aquellas en situación de pobreza o exclusión social, se enfrentan a un nuevo curso condicionadas por la elevada inflación que afecta a los productos básicos como son la alimentación y la energía.
Si bien desde el sector de los libros de texto se asegura que no es un sector especialmente inflacionista, es factible que la subida del precio del papel pueda producir una subida en el precio de los mismos, así como en el material escolar.
Nuevo plan de acción estatal
Para atajar estas situaciones de vulnerabilidad y que no condicionen el derecho a la educación de calidad de niñas, niños y adolescentes, los gobiernos cuentan este curso escolar con un nuevo instrumento político, el Plan de Acción Estatal para la Implementación de la Garantía Infantil Europea (2022-2030) cuyo objetivo es romper con el ciclo de la pobreza infantil, garantizando el acceso a seis derechos o servicios básicos entre los que se cuenta el acceso efectivo y gratuito a la educación infantil y atención a la primera infancia de alta calidad; a la educación y las actividades escolares; y a, como mínimo, una comida sana a diario en la escuela.
Este instrumento político se acompaña de una herramienta financiera: la obligatoriedad de dedicar al menos, el 5% de los recursos del Fondo Social Europeo Plus (FSE+), dentro del Marco Financiero Plurianual 2021-2027, a intervenciones dirigidas a lograr los objetivos de la Garantía Infantil Europea.
Durante este curso, Ayuda en Acción a través de su programa "Una escuela que rompe barreras", continuará trabajando en al menos 14 colegios de educación infantil y primaria de alta complejidad para fomentar un sistema educativo inclusivo que tenga en cuenta la diversidad de necesidades y capacidades del alumnado fomentando además la participación de toda la comunidad educativa.