Informar, formar y entretener. Con estas tres palabras, podemos resumir el aporte de la televisión a nuestra sociedad. Sin embargo, si echamos un vistazo a los contenidos destinados al público infantil y juvenil, durante mucho tiempo el entretenimiento ha ganado posiciones para dejar en un segundo plano a la función formativa. Pero llegó la COVID-19 y con ella la necesidad de que la educación reconquistara su espacio en las parrillas televisivas. Muestra de ello son las iniciativas que hoy te traemos y que demuestran la importancia de la televisión educativa en contextos de emergencia.


Aprendemos en casa: ejemplos de televisión educativa en tiempos de emergencia


La COVID-19 nos ha demostrado cuán profunda es la brecha digital. Durante 2020, los niños y niñas que no disponían de un ordenador o conexión a internet en sus hogares, estuvieron desprovistos de dos herramientas indispensables para acceder a la educación. A pesar de la importancia y protagonismo de las nuevas tecnologías, todavía son muchas las zonas y países en los que los índices de penetración de internet son inferiores al 50%, algo que no pasa con la televisión, presente en muchos más hogares.


México


Este país latinoamericano tiene amplia experiencia en televisión educativa al margen de emergencias. A finales de los años 60, nacía Telesecundaria y en los 80, lo hacía Telebachillerato. Se trata de un modelo educativo que llega a más de un millón de estudiantes con el objetivo de combatir el abandono y fracaso escolar y llevar estos ciclos formativos a zonas rurales o de difícil acceso.


Con la llegada de la COVID-19, los estudiantes mexicanos comenzaron el curso escolar en casa y no se prevé que se reanuden las clases el primer trimestre de 2021. El programa Aprende en Casa II es la propuesta de la Secretaría de Educación Pública para apoyar el proceso educativo del alumnado de primaria, secundaria y bachillerato.


El Salvador


El Salvador fue el primer país de Centroamérica en decretar la suspensión de las clases y probablemente la situación continuará hasta el 31 de diciembre. Desde finales de mayo, se emite en el Canal 10 el programa Aprendamos en Casa, impulsado por el Ministerio de Educación del país. De lunes a viernes de 7 de la mañana hasta las 16:30, los estudiantes salvadoreños repasan contenidos y continúan con su proceso de aprendizaje.


Las materias se organizan por días y cada ciclo formativo tiene su hora. El lunes toca Matemáticas; los martes Ciencias, Salud y Medio Ambiente; y los miércoles aprenden Lengua y Literatura. Los jueves es el turno de Estudios Sociales y Cívica; y el viernes Educación Física, Educación Artística y atención psicoemocional.



Chile


El abril, el grupo audiovisual Anatel, el Consejo Nacional de Televisión y el Ministerio de Educación se unieron con un objetivo: complementar la educación a distancia de tres millones de estudiantes chilenos afectados por el cierre de escuelas e institutos. Fruto de esta alianza nació la cadena de televisión TV Educa Chile. Ha tenido tal acogida que su emisión continuará hasta finales de este mes y están estudiando la posibilidad de que se convierta en un canal de televisión estable.


Perú


Aprendo en casa, así se llama la estrategia puesta en marcha por el Ministerio de Educación de Perú para que ningún estudiante quede atrás en su educación. Desde el 13 de abril y mientras dure la pandemia, padres, madres y docentes tienen a su disposición una web donde encontrarán recursos educativos para apoyar la formación de los niños, niñas y adolescentes peruanos. Además, varias cadenas de televisión y radio del país se han unido al Gobierno y ofrecen diariamente contenidos educativos por ciclo formativo: inicial, primaria y secundaria.



Los recursos están disponibles en otras lenguas originarias andinas y amazónicas como el quechua, el aimara o el awajún.


España


En España se calcula que el 99% de los hogares tienen televisión, frente al 83% que cuenta con conexión a internet. En marzo, el Ministerio de Educación y Formación Profesional lanzaba la iniciativa Aprendemos en casa y comenzaba la emisión de programas de televisión educativa en Clan y La 2. Ambos canales ofrecían clases de las asignaturas: lógica y matemáticas, ciencias sociales, educación artística y educación física, lengua e idiomas y ciencias naturales. En el caso de Clan, la programación estaba destinada a niños y niñas de entre seis y 12 años. Y La 2, a alumnado de entre 12 y 16 años.


El 19 de junio terminaba el curso escolar y con él, la emisión de Aprendemos en Casa. Pero a mediados de noviembre se estrenaba un nuevo programa: Aprendemos en Clan. El profesor James Van der Lust, con la ayuda de su compañero Nacho Mapacho, plantean retos y propuestas divertidas. Estas se formulan en clave de juego para que los niños y niñas potencien su capacidad de investigación, imaginación y reflexión.




Estos son solo seis ejemplos del importante papel que está teniendo la televisión educativa en esta emergencia. Pero existen muchos más que están recogidos en un informe publicado por el Banco Mundial. Ojalá que, tras la COVID-19, la educación continúe ocupando el espacio que se merece en la televisión.


banner-blog-covid-2