Con motivo del día contra el trabajo infantil (12 de junio), desde Ayuda en Acción queremos denunciar la grave situación de trabajo infantil peligroso y las formas contemporáneas de esclavitud en las que se encuentran miles de niñas, niños y adolescentes en Paraguay. En el país sudamericano, donde ejecutamos un proyecto con apoyo de la Junta de Andalucía, miles de menores son víctimas de la trata de personas y el criadazgo. Se trata de una práctica invisibilizada social y jurídicamente en el país, que genera daños irreversibles para la salud y el desarrollo de la infancia y se desarrolla en entornos de pobreza y desigualdad.
Para dar solución a esta grave situación, Ayuda en Acción y la Agencia Andaluza de Cooperación al Desarrollo (AACID) nos hemos unido a la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA), entidad referente en Paraguay con una larga trayectoria en la defensa de derechos humanos. “Esta alianza supone un paso importante en nuestro trabajo de visibilizar la situación, apoyar al sistema de protección para mejorar los mecanismos de actuación del Estado y la articulación con la sociedad civil”, declara Aníbal Cabrera Echeverría, responsable de la dirección ejecutiva en CDIA.
Violencia sexual hacia niñas en situación de criadazgo y trata de personas: un círculo perverso deshumanizante
El criadazgo consiste en el envío de niñas y adolescentes procedentes de hogares en situación de pobreza –principalmente, desde las zonas rurales–, con familias que prometen asegurar el acceso a la alimentación y educación a cambio de realizar un trabajo doméstico no remunerado. Se estima que en Paraguay esta situación afecta al menos a 47.000 menores, aunque pocos casos se notifican, al ser una situación normalizada por la sociedad.
Casas de acogida para niñas y adolescentes
Desde Ayuda en Acción y CDIA, a través de la Fundación Buen Pastor, basamos nuestro trabajo en la atención directa a niñas y adolescentes en casas de acogida especializadas que hasta hace seis años no existían en Paraguay. “Pretendemos fortalecer la atención que reciben en las casas de acogida las víctimas de criadazgo, trata y violencia sexual, con un enfoque centrado en el buen trato, en la recuperación emocional y en la reinserción sociolaboral”, señala Josué Díaz, responsable del proyecto en Ayuda en Acción.
El trabajo de ambas organizaciones, con el apoyo de AACID, para poner fin a esta forma de trabajo infantil va más allá de la atención directa. Busca fortalecer la capacidad institucional y la respuesta por parte de instituciones públicas a nivel municipal, departamental y nacional a través del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia y la Corte Suprema de Justicia de Paraguay, principales partes implicadas. “Es necesario no solo incrementar la voluntad política de las autoridades del país, sino también aumentar el presupuesto público para garantizar derechos para todas las personas, en especial los de niños, niñas y adolescentes”, aseguran desde CDIA.
Para su éxito, el proyecto requiere de la implicación de la juventud. De ahí que se trabaje en la creación de una red de jóvenes activistas que realizan una tarea de sensibilización. “Queremos conseguir que esta sea la última generación en Paraguay que entiende el criadazgo como algo normal”, afirma Josué Díaz.